La Policía Nacional, en colaboración con la Agencia Tributaria, ha desarticulado una red de narcotraficantes, afincada en Cádiz y Ceuta, dedicada a transportar hachís procedente de Marruecos a través de la costa andaluza y cuyo destino final era Francia.
La operación se ha saldado con diez detenidos y la intervención de 2.300 kilos de hachís preparados en 79 fardos.
La droga era transportada desde Marruecos en una embarcación de nueve metros de eslora que alcanzaba España a través de las costas de Cádiz, Huelva, Málaga o Almería. Su destino era otra organización de narcotraficantes ubicada en las inmediaciones de París que financiaba los gastos originados por las operaciones.
En Ceuta se asentaban los miembros de la red encargados de adquirir la mercancía en Marruecos. Una vez llegado a un acuerdo para la transacción, contactaban con otros integrantes de la organización -asentados principalmente en la provincia de Cádiz- encargados de la introducción, almacenaje y distribución de la droga hasta Francia.
En una primera fase de la operación, la Policía averiguó que se preparaba un nuevo envío de hachís al detectar la botadura de una embarcación semirrígida en el río a la altura de Sanlúcar de Barrameda (Cádiz). La nave se desplazó hasta la costa de Tánger, donde se cargó la droga y tras dos dos días de navegación alcanzó el cauce del Guadalquivir hasta Lebrija donde, tras recibir señales luminosas, se aproximó a la orilla para descargar los fardos. La Policía detuvo entonces a la tripulación de la nave y se incautó del hachís y la lancha.
Simultáneamente, la Policía desplegó un operativo en Sanlúcar, Jerez, El Puerto de Santa María y Ceuta, para detener al resto de la red.
