La entidad financiera Cajasol compró en esta edición de la Feria Internacional de Arte Contemporáneo de Madrid (ARCO) siete piezas, por un importe superior a 73.000 euros, para la Colección Cajasol.
Después de estudiar durante los tres primeros días del certamen, la caja de ahorros cerró otras tantas siguientes adquisiciones, a fin de diversificar sus fondos con artistas jóvenes y otros internacionales. La inversión realizada en esta edición supera en conjunto los 73.000 euros. De esta manera, según informó la organización a Europa Press, la colección crece de un modo transversal, con "obras que sirven de sismógrafo de un tiempo que combina elementos de varias ideas o posibilidades, tiempo como el que le corresponde vivir".
Las adquisiciones son El monumental tríptico bronce, acero y papel, de Paulo Nozolino, en la galería Visor; una pieza de Robert Polidori, de Nicholás Metivier Gallery, de Toronto; una pintura de Federico Herrero, en la galería Juana de Aizpuru, Madrid; una obra pictórica de Alejandra Freymann, en la galería Pepe Cobo; una fotografía de la joven brasileña Mona Kuhn, en la galería Charles Cowles, de Nueva York; y una pieza de Nico Munuera en la Galería T-20.
