J. R.
Cajasol, Unicaja y ahora Cajasur. La entidad cordobesa renueva su cúpula, la simplifica y le confiere un cariz más comercial. El hombre fuerte, el director general, Alfonso Tolcheff, que llegó en enero, se refuerza aún más. Objetivos: más negocio y mayor control.
Las cajas de ahorros andaluzas se afanan en renovar sus cúpulas directivas, unas para limpiar excesos de cargos, caso de Cajasol o de la cordobesa Cajasur, otras para adecuarse al crecimiento del negocio, como la malagueña Unicaja. Pero común a todas ellas, dos factores: menos estructura, a la vez que mayor control (esto es, vigilancia) por parte del director general y el presidente sobre áreas claves del negocio en un momento de desaceleración de la economía, contención del crédito y prudencia al invertir.
Ayer le tocó el turno a Cajasur.
Tres meses han pasado desde que llegara el actual director general, Alfonso Tolcheff, y ha acometido una simplificación del organigrama que se adapta "a un nuevo modelo de gestión que sitúa al cliente en el centro de todas las decisiones de la caja", indicaron fuentes de la entidad presidida por Santiago Gómez Sierra.
El esquema fue aprobado ayer "por unanimidad" en el consejo de administración de la caja de ahorros, celebrado en Córdoba. No requiere incorporaciones externas y apenas introduce cambios en los profesionales que conformaban el anterior equipo directivo. Es un organigrama, asimismo, más horizontal (menos jerarquías) y en el que Alfonso Tolcheff es el indiscutible hombre fuerte.
En torno al cliente, se configuran las siguientes áreas relacionadas con la actividad comercial y de negocio: Banca Minorista (Santiago Cabezas), Banca Privada (Antonio Cruz Conde), Planificación Comercial y Marketing (Ignacio Sánchez Carreto), Tesorería y Mercados de Capitales (Ángel Cañadilla), Riesgos (Juan Manuel Bejarano) y Empresas Participadas (Miguel Ángel Trigo).
También bajo la supervisión de la Dirección General -esto es, de Alfonso Tolcheff-, se distribuyen otras áreas de responsabilidad, a saber: Financiera y de Intervención (Rafael Pulido), Soporte (Antonio Barral), Asesoría Legal (Francisco Paniagua), Sistemas (Ángel Roldán), Recursos Humanos, (con María Teresa Martínez Guerrero) y Secretaría General (en manos de Gaspar Murillo).
En total, pues, doce altos cargos -una veintena en el organigrama anterior- bajo la estrecha vigilancia del director general. Ni hay directores generales adjuntos ni subdirectores. Tampoco existen ya en Cajasol.
