El líder conservador David Cameron se dispone a gobernar en minoría si su partido gana las elecciones del próximo jueves con un número insuficiente de escaños.
Cameron, a quien los últimos sondeos atribuyen el mayor número de votos, se resistirá a formar una coalición con los liberaldemócratas, según fuentes de su partido citadas hoy por el conservador Daily Mail. En su lugar, intentará formar gobierno y retará al dirigente liberaldemócrata, Nick Clegg, a votar en contra de su programa de gobierno, algo que obligaría a convocar nuevas elecciones y que los votantes tal vez no perdonarían, según creen los tories.
Los últimos sondeos, publicados por The Guardian y The Sun, atribuyen a los conservadores un 33 y un 34% de los votos, respectivamente, a los liberaldemócratas, un 28% y un 29%, y a los laboristas, un 28% en ambos casos. La ventaja atribuida a los tories en la intención de voto no les daría, sin embargo, una mayoría absoluta de escaños en la Cámara de los Comunes -necesitarían 326, de 209 que tienen ahora-, con lo que, de llegar a gobernar, tendrían que hacerlo en coalición o buscando acuerdos puntuales.
El sistema electoral británico no es de representación proporcional, sino que gana el escaño correspondiente a cada circunscripción el candidato de cualquier partido con más votos, de modo que el resto de los sufragios en esa demarcación "se pierden" y no quedan reflejados en la Cámara de los Comunes. Esto significa que el partido con más votos a nivel nacional puede no obtener el máximo número de escaños si no llega a controlar la mayor parte de las circunscripciones, y en cambio otro con menos votos totales puede hacerlo si se hace con la mayoría de ellas.
Este sistema favorece la formación de mayorías parlamentarias estables y beneficia a los grandes partidos (el Laborista y el Conservador), y perjudica especialmente a la tercera fuerza del país, el partido Liberal Demócrata, el cual, a pesar de su aumento de popularidad a nivel de intención de voto, no tiene opciones reales (salvo vuelco electoral milagroso) de gobernar en solitario.