El presidente de la Generalitat, Francisco Camps, efectuó ayer una remodelación de su Gobierno cuando se cumplen 24 días del archivo del caso Gürtel y 16 del repentino fallecimiento del consejero de Medio Ambiente, Agua, Urbanismo y Vivienda, José Ramón García Antón.
Camps explicó en una rueda de prensa que la muerte de García Antón y la situación económica son las únicas causas de la remodelación de su Gobierno, en el que no hay caras nuevas ni destituciones y en el que las novedades se limitan a un cambio de carteras que afecta una tercera parte de su Ejecutivo. Esta remodelación reduce de 14 a 13 el número de consejerías, al desaparecer la de Presidencia, y quedar repartidas sus competencias entre Economía y Justicia y Administraciones Públicas, ya que la titular de esta última, Paula Sánchez de León, será la nueva portavoz.