El expresidente valenciano, Francisco Camps, absuelto de un delito de cohecho impropio en la causa de los trajes del caso Gürtel, visitó el pasado domingo la basílica de la Macarena, según anunció la propia hermandad a través de su nueva página web.
La visita fue "exprofesa y privada", y tuvo como principal objetivo ofrecer "las intenciones de una misa a la Santísima Virgen", según explicaba la reseña de la cofradía que aparecía en la portada de la web, que horas más tarde fue retirada. El expresidente valenciano estuvo en todo momento acompañado por el presidente del PP Andalucía, Javier Arenas; y los alcaldes de Tomares, José Luis Sanz; y de Sevilla, Juan Ignacio Zoido, si bien esta información no trascendió y se mantuvo de forma absolutamente privada hasta que la hermandad la publicó en su nueva web. En la visita también estuvieron el actual hermano mayor de la Macarena, Manuel García, y su antecesor en el cargo, Juan Ruiz Cárdenas.
Según la hermandad, Camps profesa una especial devoción a la Esperanza Macarena, a la que "se encomienda en los momentos de mayor necesidad". En las últimas semanas, el expresidente valenciano ha sido juzgado, acusado de recibir trajes a cambio de contratos a la empresa Orange Market, filial valenciana de la red Gürtel.
No es la primera vez que Camps muestra públicamente su devoción a la Hermandad de la Macarena. Hace algunos años, durante el mandato de Ruiz Cárdenas, se le pudo ver durante una Madrugada cangrejeando delante del paso del Señor de la Sentencia antes de que entrara en la Campana durante la estación de penitencia. El expresidente valenciano también colaboró de forma activa en la financiación de las obras de ampliación y reforma del museo de la basílica. A los 300.000 euros que aportó el Ayuntamiento de Sevilla para financiar las obras se sumó la subvención del millón de euros que se logró gracias al acuerdo de colaboración firmado en su día con la Caja de Ahorros del Mediterráneo (CAM), hoy intervenida por el Banco de España. Este acuerdo con la caja levantina se rubricó después de que el Gobierno de José Luis Rodríguez Zapatero se negara a enviar a la corporación de la Madrugada los fondos que, a su vez, comprometió el Gobierno de José María Aznar en 2003. El objetivo del Ejecutivo del PP fue incluir el proyecto de remodelación de la Basílica en el programa del 1% cultural.
