Cuatro meses buscando en un lugar en el que, según dice ahora Miguel Carcaño, no está el cuerpo de Marta del Castillo. El asesino de la joven negó ayer que él haya señalado la escombrera de Camas, donde la Policía busca desde marzo tras estar trabajando en la zona desde principio de año, y sostuvo que la chica está enterrada en la finca de la Majaloba, en La Rinconada, donde el año pasado se buscó sin éxito. Carcaño también negó que quiera hacer daño a la familia y dijo que su intención es «ayudar».
El joven declaró por videoconferencia desde la prisión de Herrera de la Mancha (Ciudad Real) por un nuevo delito contra la integridad moral que se le imputa ante el daño causado a la familia de Marta por sus nuevas versiones. Miguel, que se mostró «tranquilo», se mantuvo en la última versión del crimen que consta por escrito y en la que contó que fue su hermano Javier Delgado el que mató a Marta y que luego ambos la enterraron en la finca de la Majaloba. Sin embargo, sobre la participación del hermano no fue preguntado, pues la causa está archivada, y ahora sólo se trata de averiguar si cometió el citado delito al dar otro paradero falso del cuerpo.
Según explicó la abogada de la familia, Inmaculada Torres, el joven ratificó su versión y ha mantenido que el cadáver de Marta está en el «paraje» situado junto a la carretera de La Rinconada kilómetro 1, y que no sabe por qué no ha aparecido allí después de que la Policía rastreara el lugar con una máquina excavadora hace un año. Además, dijo que no quiso hacer daño a la familia de la chica, sino «ayudarla». Miguel también negó que él haya señalado la escombrera de Camas, donde la Policía sigue buscando a la chica.
Los agentes llegaron a la conclusión de que Marta podía estar en este lugar por lo posicionamientos de las llamadas, tras lo que realizó el llamado test de la verdad a Carcaño que reaccionó de forma positiva en esta zona. Luego la Policía llevó a Miguel hasta la escombrera y éste asintió y señaló con la mano una amplia zona, según relataron en su momento fuentes del caso. Sin embargo, el chico niega ahora este extremo, sobre el que además no hay constancia escrita.
Torres no quiso pronunciarse sobre la credibilidad de esta declaración, asegurando que habrá que llegar «hasta donde la Justicia quiera». También señaló que es pronto para indicar qué diligencias va a solicitar para poder acreditar que Carcaño cometió un delito contra la integridad moral. La abogada le preguntó a Miguel si con su última versión buscaba el protagonismo en los medios de comunicación, a lo que el joven, que se ha mostrado ha contestado: «sólo quiero ayudar a la familia».
Miguel contestó a todas las preguntas, que en su mayoría fueron realizadas por el juez del caso, Francisco de Asís Molina. La Fiscalía es la única que no ha planteado ninguna cuestión al joven, mientras que a preguntas de su defensa insinuó que desconoce si alguien pudo cambiar el cuerpo de la chica de lugar después de que él lo enterrara en La Rinconada.
Por su parte, el padre de Marta, Antonio del Castillo, restó ayer toda credibilidad a Carcaño. «Ya no me creo nada de lo que diga», dijo el padre de la chica tras conocer que Miguel había vuelto a insistir en que su hija está en la finca la Majaloba. En declaraciones a Europa Press, Antonio del Castillo puso de manifiesto que el asesino de su hija «podría haber dicho la verdad desde el primer momento».
El padre de Marta también se refirió al hecho de que Carcaño haya declarado que «nunca» dijo que el cuerpo de Marta estuviera en la escombrera de Camas, aseverando que, muy al contrario, Miguel «estuvo físicamente en Camas señalando diferentes ubicaciones entre los escombros».
En cuanto al hecho de que el joven haya dicho que su intención «no era hacer daño a la familia sino ayudarla», Antonio del Castillo le replicó que «ya lleva tiempo haciéndoles daño», pues hace ya más de cinco años del crimen y aún siguen sin saber dónde está su hija.
