Carlos García posa en la ciudad deportiva.
-Se pierde usted el debut del nuevo entrenador. Perderse un partido ya es un marrón, pero más en esta coyuntura, ¿no?-Sí que es el peor momento para estar sancionado, pero así son las cosas. No le doy más vueltas.
-Cuando llega un nuevo entrenador, suele cambiar a muchos jugadores. ¿Se siente usted en peligro por ser un fijo para el anterior técnico?
-No. Si tiene que haber cambios, los habrá. Hay que trabajar y esperar que el míster vea quiénes se acercan a lo que quiere.
-¿Cómo va a ser el Betis de Víctor Fernández?
-Todavía es pronto. El domingo no se verá todo lo que pide el míster, aunque esperemos que se acerque. Va a ser un equipo que empiece jugando desde atrás, tenga el balón, apriete arriba...
-Él quiere subir jugando bien. ¿Eso es posible?
-La verdad es que no hemos jugado muchos partidos buenos, pero es posible, claro. Cuanto mejor juegues, más posibilidades tienes de ganar.
-¿Veían ustedes venir que el ciclo de Tapia se acababa?
-No es que se viera venir, pero si los resultados no salen, el entrenador no tiene el puesto tan asegurado. Sabíamos que era una posibilidad y nosotros estamos para hacer lo que nos piden y subir como sea, esté quien esté.
-Cuando un club echa a un entrenador, ¿el futbolista siente algún cargo de conciencia?
-Cuando echan a un entrenador, para el jugador es un fracaso personal. Quiere decir que no se han hecho las cosas bien y que hay que cambiar.
-¿En qué falló Tapia?
-No falló sólo él, fallamos todos. Se entró en una dinámica mala que no supimos reconducir.
-Si las cosas siguen funcionando mal, está claro ya no será cuestión del técnico, ¿no?
-Y aunque no cambiase el técnico. Los máximos responsables somos los jugadores. El que no asuma su responsabilidad, que no lo haga, pero cada uno debe asumirla para mejorar la situación.
-¿La actitud del jugador cambia cuando hay otro míster?
-Mi actitud es la misma esté quien esté. Quizás como el míster no conoce en profundidad a los jugadores, todo el mundo intenta demostrarle lo mejor e igual ahí hay un cambio de actitud, pero no sé hasta qué punto. La actitud siempre debe ser la misma.
-Víctor prefiere no fichar centrales. ¿Eso le reconforta?
-Si él dice que está contento con la gente que hay, es de agradecer, pero todos sabemos dónde estamos y si tiene que venir gente, pues que venga. Por mucho que pensemos en ello, no va a influir en que el club decida fichar o no.
-¿Hay psicosis fuera de casa?
-Más que psicosis hay muchas ganas de sacar algo bueno de Córdoba, aunque es verdad que la dinámica es malísima fuera de casa.
-Aunque usted sea defensa, ¿qué le pasa al Betis en ataque?
-No sé cómo contestar porque lo hemos intentado de distintas formas y no lo hemos conseguido. Nos cuesta mucho no hacer gol, sino crear ocasiones, y así es muy difícil ganar partidos.
-El equipo vuelve a entrenarse a puerta abierta. ¿No ha sido un poco excesivo pasar más de dos meses lejos de la afición?
-No sé si ha sido excesivo, pero se tomaron unas medidas y ahora las puertas ya están abiertas. Eso va a traer normalidad y quiere decir que la gente apoya al equipo. Con lo mal que lo estamos haciendo, que la gente te siga dando su apoyo hasta en los entrenamientos es muy positivo y nos da muchas fuerzas.
