Carlos Vázquez, director del grupo municipal de IU, proveniente del núcleo duro del Partido Comunista de Andalucía (PCA) ocupará la delegación municipal que deja vacante Jon Ander Sánchez, quien decidió dmitir el miércoles por dscrepancias internas entre él y el portavoz de IU en el pleno, además de primer teniente de alcalde, Antonio Rodrigo Torrijos.
IU cumple con la exigencia del alcalde de Sevilla, Alfredo Sánchez Monteseirín (PSOE), de encontrar un sustituto a Sánchez en menos de 24 horas para que un asunto interno de sus socios de gobierno no afecte a la gobernabilidad de Sevilla, y menos en plena crisis. Jon Ander Sánchez ocupaba también la concejalía de Empleo. Para ello coloca en la concejalía a alguien del núcleo duro comunista, además de estar en la más absoluta sintonía con Torrijos.
La salida de Jon Ander Sánchez ha vuelto a desestabilizar al Ayuntamiento y ha introducido un nuevo elemento de desgaste para el alcalde y todo el Gobierno local, que se busca cerrar ahora con este nombramiento. El propio Rodrigo Torrijos lo admitía a las pocas horas de conocerse la dimisión: "Se le ha dado una munición impagable a la derecha que quiere echarnos del Gobierno".
El origen de la crisis se puede rastrerar a finales del mes de julio cuando el comité local del PCA, fuerza mayoritaria en IU, adoptó un giro estratégico que unos vinculan a la decisión de amarrar la candidatura de Torrijos en 2011 y otros a un intento por reactivar la gestión. La consecuencia fue un listado de ceses y cambios de funciones entre los altos cargos del gobierno local. En este paquete figuraban dos personas estrechamente vinculadas a Jon Ander Sánchez: su esposa, Ana Vignerón -alto cargo de su delegación- y el actual gerente de Sevilla Global y ex responsable del IMD, José Ramírez.
La tensión entre Torrijos y Sánchez se acrecentó en este contexto, entre otros motivos porque la nueva línea de trabajo fue entendida por el responsable de Empleo como una "tutela" sobre su gestión. Para el ya dimitido, el motivo fue que el primer teniente de alcalde vio en él una amenaza para presentar su candidatura en 2011. Para el portavoz de Izquierda Unida, hubo una serie de críticas sobre la gestión de Economía y Empleo que Sánchez "no supo encajar".
