El equipo sevillista celebra su gol ante el Elche. Foto: Efe
El curso 2013/14 llegó a su fin con una nueva victoria (3-1) que pone la guinda a la que es ya una de las mejores temporadas de la historia del Sevilla. El título de campeón de la Europa League conquistado en Turín y el quinto puesto, certificado este domingo tras la derrota de la Real Sociedad, así lo acreditan. Quién lo diría. Especialmente cuando este equipo era colista y nadie sabía si la revolución llevada a cabo el pasado verano en el plantel iba a dar frutos o quebraderos de cabeza en este primer año de un proyecto de tres, como así expuso el propio club. Sin embargo, lejos de tambalearse, el Sevilla fue creciendo, forjándose y superando varapalos como la eliminación de la Copa ante el Racing, de Segunda B. A base de esfuerzo, este Sevilla logró adentrarse en la tramo decisivo de la temporada con fuerza, y ahí, poniendo en jaque el corazón de sus aficionados una y otra vez, algo que va cosido al escudo de este club, logró tocar el cielo con sus manos.
Éste será, sin duda, el gran recuerdo que deje la temporada 2013/14 a los aficionados, que este domingo despidieron a su equipo en el Sánchez-Pizjuán prolongando la fiesta hasta la última jornada. El gran trabajo de Unai Emery y sus jugadores no sólo se limita a la Europa League. Hasta hace apenas tres semanas estuvieron luchando con el Athletic por alcanzar una plaza en la mismísima Liga de Campeones. No pudo ser, pero al menos cierra el torneo doméstico ocupando el quinto puesto de la clasificación y, además, regalando una nueva goleada a su parroquia.
QUINTA MEJOR PUNTUACIÓN. Dos goles de Iborra y uno de Jairo permitieron al Sevilla derrotar al Elche en un partido sin historia más allá de la gran fiesta, sumar un nuevo triunfo y alcanzar la cifra de 63 puntos. Es el quinto mejor registro en la historia de la entidad (sólo ocho puntos menos que los 71 conseguidos por aquel equipo de Juande Ramos en la mágica temporada 2006/07). Se dice pronto. El mérito, este Sevilla de Emery es enorme.
En el fin de fiesta, el técnico aprovechó para dar minutos a chavales de la cantera como Carlos Fernández o Cotán, titulares en un Sevilla que no perdonó al Elche, salvado desde la pasada semana. Sin presión y con mucha más calidad, los goles fueron cayendo para alegría de un estadio que vibró entonando el Himno del Centenario y todo tipo de cánticos con casi 33.000 almas en sus gradas dejándose la garganta.
Todo ello con ovaciones para Fazio, Reyes, Alberto Moreno, a quienes el técnico sustituyó para que recibiesen ese premio. O a Rakitic, que jugó unos minutos ¿los últimos? y fue aclamado. Un año, en definitiva, para el recuerdo.
All Goals - Sevilla 3-1 Elche - 18-05-2014 por Tai-T
