El portugués Daniel Carriço, ya recuperado de su lesión, ha explicado esta mañana en la radio del club que ha pasado "dos meses muy complicados" y que ahora sólo tiene que "mirar al futuro". "Ahora tenemos muchos partidos importantes y el objetivo es ganarlos todos. Estoy contento porque estoy jugando partidos y siempre que entro intento darlo todo al servicio del club y de los compañeros. Quiero que esto siga así, con buenas prestaciones para ganar los partidos". Eso sí, no pone ninguna traba a la hora de actuar en el centro de la defensa o algo más adelantado: "Me siento bien en las dos posiciones. De central he jugado más pero en los últimos años lo he hecho más de pivote. Tengo confianza en ambos puestos y lo que quiero es jugar. Donde el míster crea que puedo rendir más, estaré disponible". Sobre el partido de este miércoles, el jugador luso ha reconocido que lógicamente "tiene respeto" al Real Madrid aunque el objetivo del Sevilla es "ir a ganar". "El respeto es una cosa y el miedo otra, así que tenemos que entrar con muchas ganas para sacar algo positivo. Sería dar un golpe en la mesa y vamos a plantearlo bien. Creo que es posible, aunque sabemos que será complicado". En cuanto a las claves del partido, Carriço cree que "la concentración debe estar presente desde el primer minuto. Creo que también es importante la agresividad contra los grandes, porque si no te pueden hacer daño y remontar es muy complicado". Además, dejó claro que el vestuario está aislado de suspicacias arbitrales: "Pensamos en nosotros mismos. El arbitraje tiene su responsabilidad en el fútbol, pero nosotros pensamos en nuestra función. Lo demás, lo dejamos para otras personas".