La nueva Orden para la mejora de caminos rurales, publicada varios meses antes de lo previsto para acelerar al máximo las obras de reparación de los daños ocasionados por el temporal, recoge como principales novedades que, por vez primera, la dotación presupuestaria se eleva hasta los 30 millones de euros, y la posibilidad de contar con ayudas que ascienden al total de la inversión, sin necesidad de que los ayuntamientos aporten financiación.
La partida presupuestaria destinada a la mejora de caminos rurales se enmarca en el eje 1 del Plan de Desarrollo Rural (PDR), y está cofinanciada al 70% con fondos FEADER.
Otra de las ventajas recogidas por la citada Orden es que las entidades beneficiarias podrán solicitar anticipos de las ayudas.
Aparte de para la reparación de las infraestructuras agrarias -mediante obras de construcción y mejora de caminos rurales y de infraestructuras públicas de apoyo a la producción, salvo electrificación-, la nueva Orden incluye líneas de ayudas para la prevención de daños causados por adversidades climatológicas. Así, se contemplan inversiones para la corrección de sistemas de drenaje y desagüe en infraestructuras distintas de los caminos rurales y en sistemas complementarios de suministro de agua,con excepción de explotaciones individuales.
