Los sindicatos UGT-A y CCOO-A han rechazado el dispositivo policial establecido por la Delegación del Gobierno en Andalucía con motivo de la huelga general del 14 de noviembre, con 18.000 efectivos, algo que consideran una "auténtica toma policial" y que tiene un carácter desproporcionado", tras lo que han denunciado la existencia de "presiones y abusos" por parte de las empresas hacia sus trabajadores.
El secretario general de CCOO-A, Francisco Carbonero, y el secretario general de UGT-A, Manuel Pastrana, han participado en una asamblea con mujeres con motivo de la huelga general, donde han aprovechado por hacer un último llamamiento a secundar la huelga y las manifestaciones convocadas para este miércoles, y consideran que "la rebeldía se verá de forma contundente en las calles".
Pastrana ha expresado su "sorpresa" por el hecho de que la Delegación del Gobierno ha establecido para la huelga 18.000 policías en las calles andaluzas, ante lo que ha asegurado que "no va a haber 18.000 sindicalistas ni piquetes", por lo que cree estos efectivos una cifra "absolutamente abrumadora", que supone "un esfuerzo tan absolutamente desproporcionado que lo único que pretende es disuadir a la gente para que no ejerza su derecho".
El dirigente sindical espera que los responsables políticos de las fuerzas policiales "tengan la sensatez de no pasarse ni un milímetro, de no vulnerar los derechos de la gente a manifestarse pacíficamente ni violar el derecho a que la gente pueda participar en piquetes informativos".
En ese sentido, ha dejado claro que UGT y CCOO tienen previsto que la huelga y las actuaciones de los piquetes se desarrollen "con la normalidad que se han desarrollado las nueve huelgas generales anteriores".
"No hay llamamiento a la gente que va participar en la huelga que no sea otro que el cumplimiento estricto de la legalidad, pero tampoco estamos dispuestos a que haya una toma policial de las calles de Andalucía, y un operativo de 18.000 agentes en las calles es mucho más que prevenir cualquier tipo de conflicto, es una toma policial de las calles de pueblos y ciudades andaluzas", ha aseverado Pastrana.
Este dirigente sindical considera "absolutamente desproporcionado" dicho despliegue y apunta que "ante la situación de austeridad que predica el PP, se podría destinar los recursos a necesidades más vitales de la gente que a emplearlos en hacer un alarde y despliegue de fuerzas policiales que no tienen el más mínimo sentido en una situación de democracia y en el ejercicio de un derecho democrático".
Pastrana asimismo, tras citar el caso de una chica de 22 años a la que han "amenazado" en su empresa con despedirla si hace huelga, ha apuntado que en los últimos días ha recibido "muchas peticiones" de trabajadores que plantean que vayan los piquetes a sus empresas porque "no les permiten hacer huelga y los amenazan con despedirlos". Además apunta la existencia de empresas que "han planteado a sus trabajadores que se lleven saco de dormir esta noche para quedarse en la empresa y mañana trabajar a puerta cerrada".
"Hay empresas que han perdido totalmente la vergüenza y están actuando contra los derechos básicos constitucionales, hay situaciones de abusos y violación de derechos", ha aseverado Pastrana, quien ha ofrecido los servicios jurídicos de UGT-A para asesorar de forma gratuita a trabajadores y colectivos que quieran llevar a la Justicia las medidas de "presión y abusos ejercidas y violación de derechos básicos para que la gente no vaya a la huelga".
"El día después de la huelga seguiremos peleando no solo en España y los otros países castigados por la crisis y las políticas económicas, sino en toda la UE", ha agregado Pastrana, quien apunta que "a partir de la huelga los trabajadores seguiremos peleando por nuestros derechos, movilizando y reivindicando hasta que esta política termine de ser el hacha que va cortando el conjunto de derechos laborales y sociales y que va destruyendo piedra a piedra el modelo social europeo".
Pastrana considera que "la diferencia de esta crisis con el resto de las crisis que hemos vivido es que hoy se están adoptando reformas estructurales que una vez que finalice la crisis se va a ver desmantelado totalmente el entramado legal, de derechos sociales y laborales, mientras que en otra crisis ha finalizado, se ha recuperado la economía y el empleo y ha existido normalidad, de forma que la diferencia será que nos vamos a encontrar con un panorama con un mercado de trabajo desregulado donde los trabajadores no tendremos ningún derecho y un tejido social de derechos privatizados y las necesidades de la gente absolutamente mercantilizadas".
REUNIÓN CON MUJERES
Por su parte, el secretario general de CCOO-A, considera que este último acto pretende "hacer un llamamiento a la sociedad andaluza para que este miércoles sea un día de contestación no solo de aquellos que tengan empleo, sino de la sociedad, contra unas políticas que generan tremendamente desigualdades".
Carbonero ha querido que este último acto sea con organizaciones sociales de mujeres se traslade el mensaje de que la crisis "no solo quita derechos sino que está retrocediendo en materia de políticas de igualdad, se quiere retroceder en todos los avances en este país en relación con la igualdad entre hombres y mujeres".
"Esa lluvia fina que nos viene diciendo todos los días de la imposibilidad de que haya otras políticas se está reflejando además en quitar sanidad, educación o no educar en igualdad, o quitar dependencia", ha aseverado Carbonero, quien recuerda que la igualdad de hombres y mujeres y cambio de la mentalidad social son "avances registrados en los últimos años, fruto de la movilización".
Carbonero destaca que "dos movimientos en el mundo han transformado a la sociedad, el movimiento obrero y el de las mujeres, y esa simbiosis de trabajadores y lucha por la justicia social y por la igualdad va a tener un exponente este miércoles en la huelga general".
El dirigente sindical espera un seguimiento "masivo" de los trabajadores y prevé que "todos los colectivos de la sociedad, pensionistas, parados, autónomos, trabajadores del sector público y del sector privado, van a estar en la calle diciendo basta y que no es posible continuar así y pidiéndole al Gobierno que rectifique inmediatamente".
"El Gobierno de Rajoy, al que no le importa exhibir su nacionalismo y envolverse en la bandera, si quiere coger la bandera con dignidad tiene que cambiar las políticas para no arruinar a las personas y a este país para siempre", asevera el dirigente sindical.
Carbonero considera que "lo que agobia a los trabajadores es la presión permanente y la incertidumbre a perder empleo, a no tener sanidad, a que sus hijos no tengan una educación, a que las personas mayores no puedan revalorizar sus pensiones o a que se le quite la dependencia; se puede tener miedo pero cuando te quitan tantas cosas y lo pierdes todo, el miedo también se pierde y cuando se pierde el miedo, con toda seguridad la rebeldía se va a ver con toda la contundencia en las calles andaluzas".
