Centenares de personas han desfilado por el salón de recepciones del ayuntamiento de Valladolid para dar el último adiós al escritor Miguel Delibes, fallecido el 12 de marzo de 2010 a los 89 años.
Personas de avanzada de edad, especialmente mujeres, han pasado ante el féretro cerrado, instalado en el salón de recepciones, a cuya cabecera hay un crucifijo y a uno de sus lados un retrato al óleo del novelista firmado por el pintor Álvaro Gal.
No han cesado de llegar ramos de flores y coronas remitidos por representantes del mundo político, cultural, social, económico, deportivo e institucional.
Destacan las coronas enviadas por las casas Real y del Príncipe de Asturias, el Ministerio de Cultura, la Junta de Castilla y león, la Universidad y la Diputación de Valladolid, la ciudad de Salamanca, la Sociedad General de Autores, el Consejo Superior de Investigaciones Científicas y el Real Valladolid de fútbol.
Además, hay un libro de condolencias, al que rodean, sobre una mesa, algunos de los libros más significativos de Miguel Delibes.