Los trabajadores de Cerámicas Bellavista han añadido una acción más a sus protestas contra la empresa Roca, que hace unas semanas anunció el despido de 191 de los 241 trabajadores de la fábrica nazarena. El comité de empresa ha empezado a recoger firmas que entregarán a la Diputación de Sevilla.
Los sindicatos ya han declarado que salieron "fortalecidos tras el éxito de la manifestación" de la semana pasada, a la que según ellos acudieron unas 5.000 personas. Por ello, conscientes de la relevancia del apoyo ciudadano, han empezado a recoger firmas contra el cierre de Cerámicas Bellavista en zonas como la puerta del Ayuntamiento, la plaza de abastos o el centro Carrefour.
Los empleados pretenden, según su presidente, Juan Carlos Cortés, solicitar una reunión con la Diputación para implicar en su lucha a todos los ayuntamientos sevillanos para que den muestra pública de "su repulsa a la deslocalización productiva de la firma Cerámicas Bellavista", comenta. A esta iniciativa se han adherido los ayuntamientos de Dos Hermanas y Sevilla -a través de su teniente de alcalde, Antonio Torrijos-.
"Cuando tengamos un número considerable de firmas, se lo presentaremos también a la directiva de la fábrica" declaró Remedios Cárdenas, delegada local del sindicato UGT, que también precisó que el único deseo de los trabajadores es que este conflicto "se acabe pronto", puesto que "lo ideal sería que no tuviéramos ni que utilizar la recogida de firmas". Esta pretensión de los trabajadores contrasta con la situación que dibujó recientemente el propio alcalde de Dos Hermanas, Francisco Toscano (PSOE), que ya alertó al comité de que el conflicto laboral sería un proceso largo.
Mientras, la empresa Roca se va quedando sola en su empeño de aplicar el Expediente de Regulación de Empleo (ERE), que acabará con la producción de la fábrica nazarena. Y es que los directivos siguen convencidos de que esa acción es la única solución para salvar una de las dos plantas sevillanas -la de Alcalá de Guadaíra-. De hecho, en la reunión que tienen hoy con el comité mantendrán su postura de trasladar la producción a la fábrica de Alcalá, aunque fuentes de la multinacional indicaron también que "se tiene por costumbre no emprender ninguna acción hasta alcanzar un acuerdo socioeconómico" comentaron. Además, indicaron que entienden la postura de la Junta y el consistorio de apoyar a la plantilla, pero no sin antes recordarles que "tarde o temprano tendrán que enfrentarse con la realidad".
