Europa no tiene sentido sin su modelo social y sin los valores que propugna el Tratado. Lo que la diferencia del resto del mundo es precisamente eso, el Estado del Bienestar, y si esta premisa se pierde para hacer feliz a un mercado cada vez más exigente, la Unión se queda sin razón de ser de cara al mundo. Y ante esa circunstancia, tiene el "deber de defenderse". Así lo propugnó el coordinador del Grupo de los Socialistas y Demócratas para la Comisión de Empleo en el Parlamento Europeo, Alejandro Cercas, durante su participación en el foro Hablemos de Europa organizado por El Correo de Andalucía en colaboración con la Comisión Europea y el Parlamento Europeo en el Hotel Gran Meliá Colón de la capital hispalense, donde impartió la conferencia La Europa social en la encrucijada.
"Como nos carguemos el modelo social europeo, nos cargamos Europa", sentenció, al tiempo que recordó que tras cuatro años desde que estallara la crisis económica a nivel mundial, en el Viejo Continente "tenemos más paro, más deuda pública, más pobreza, más diferencias y los nacionalismos están tomando mayor peso, así que nos encontramos peor que antes" de que se tomaran medidas para luchar contra esta situación.
Así, recordó que Europa cuenta con una serie de valores y principios, como la lucha por la sanidad, la educación y el empleo, que son la "base de un modelo social que no tienen en ninguna otra parte del mundo" y que está en peligro debido a la crisis económica y a la presión que los mercados están ejerciendo sobre los Estados en los últimos tiempos. "No parece lógico que sean los enfermos, los parados o las personas mayores las que tengan que pagar la bulimia del sistema financiero internacional", argumentó Cercas.
En este contexto, declaró, los ciudadanos europeos "no entenderán ni aceptarán los sacrificios si no hay un todo coherente", más aún si es "impuesto desde el centro hacia la periferia y crea desequilibrios, lo que fomentará la asunción de partidos de extrema derecha". "No querrán vivir en un mercado interior sin reglas en el que se pierde lo social, ya que creyendo salvar al Mercado Único se está destrozando".
En cualquier caso, reconoció que son y serán necesarias políticas de ajuste, al tiempo que defendió que Europa se erija como el lugar del mundo "donde se producen bienes y servicios de altísimo valor añadido". "Somos 500 millones de personas frente a 7.000, el 6% de la población del planeta. Ya no somos el centro del mundo", indicó. Ante esta evidencia, se preguntó si el papel de Europa ahora es competir con las economías emergentes como la India o China, que propician las desigualdades y la precariedad laboral. "No debemos entrar en eso, porque, si algo está claro, es que una economía sana sólo se desarrolla en una sociedad sana".
En este sentido, explicó que los países que destinan menos partidas a garantizar el bienestar de sus ciudadanos al final acaban pagándolo por otro lado, como en defensa o en cárceles. De ahí que Cercas centrara su discurso en que, aunque hay que ajustar gastos e ingresos, "los valores hay que mantenerlos, esos valores que han permitido reconciliar a las grandes potencias europeas, que se incorporaran los del sur y que se integraran los Estados procedentes de la antigua Europa comunista; eso no se puede perder por un simple mercado".
De ahí que el eurodiputado español alegara que la Europa, tal y como se entiende, "merezca ser defendida" ante los ataques que está recibiendo en la actualidad. "La Europa social es una opción ética, humanística, por lo que ahora no podemos imponer una visión tan materialista, porque hay un profundo valor ético que estamos poniendo en riesgo por intentar salvarnos", recalcó, sobre todo si se tiene en cuenta que este modelo ha garantizado la paz social en el continente en los últimos 60 años. "Ha vivido los mejores años de su historia, incluso una generación se ha librado de vivir una guerra después de 500 años de continuas disputas, una circunstancia que antes no se había dado".
A este respecto, Cercas añadió que los gobiernos del Viejo Continente de todos los colores políticos, incluidos los socialdemócratas, "han tragado" ante las exigencias de los mercados financieros, lo que se ha constituido, argumentó, como un "éxito total del liberalismo". "Se nos está vendiendo que no podemos hacer nada frente a algo que se nos ha impuesto, la crisis económica, pero eso no es así, hay más caminos, por eso digo que Europa está en una encrucijada", indicó.
Con anterioridad, el eurodiputado socialista desgranó las circunstancias que han debilitado el modelo del continente, entre ellas, la caída del comunismo, que ha permitido instalarse sin ataduras al capitalismo. Además, apuntó al envejecimiento de la población europea.