La ministra de Defensa, Carme Chacón, presidió ayer en el cuartel de Hoyo de Manzanares el acto de jura de bandera, en el que pudieron participar todos los alumnos y mandos de la academia militar tras levantar la movilidad restringida para controlar el brote de gripe A.
Fuentes del Ministerio de Defensa explicaron que junto a la ministra al acto castrense, celebrado en la sede de la Academia de Ingenieros y Transmisiones del Ejército, asistió el jefe del Estado Mayor del Ejército (JEME), general Fulgencio Coll.
Chacón pronunció un discurso y también el director del acuartelamiento, el general de Brigada Pedro Vivas, quien le expresó su agradecimiento por el apoyo recibido durante los últimos diez días, tras la detección de los primeros casos de gripe en el recinto y la polémica originada posteriormente. "Hemos contado con su presencia dos veces, en momentos difíciles y complicados", afirmó Vivas ante los alumnos del segundo ciclo de tropa profesional que juraban bandera.
También hizo hincapié en que desde que aparecieron los primeros casos contó con todos los medios necesarios, y con los "mejores profesionales" del Instituto de Medicina Preventiva de la Defensa. Igualmente, el general Vivas destacó que el período de cuarentena intensificó la convivencia en el cuartel y permitió estrechar los vínculos de compañerismo. De la misma manera, Chacón mostró sus agradecimientos a los militares de Hoyo, por su actitud "ejemplar", y a sus familias por la "paciencia que han demostrado", y se comprometió a continuar sus esfuerzos para aproximar las Fuerzas Armadas a la sociedad. "Siempre me tendréis a vuestro lado", proclamó la ministra.
Aún así, un total de 23 casos por posible contagio del virus de la gripe A/H1N1 en la academia de Hoyo de Manzanares se mantienen todavía en estudio, según notificaron ayer las autoridades sanitarias de Defensa al Ministerio de Sanidad. Respecto a los casos confirmados, el Instituto de Salud Carlos III ha confirmado hasta la fecha 29 casos del virus A/H1N1 en el acuartelamiento, cuyos militares comenzaron a abandonar ayer las instalaciones tras diez días de cuarentena.