El Defensor del Pueblo Andaluz, José Chamizo, pidió ayer una "reacción" del Parlamento a sus aportaciones y recomendaciones y defendió la aprobación de una nueva ley reguladora de esta institución, pues la actual tiene 25 años.
Desde 1983, el Defensor del Pueblo Andaluz ha tramitado 80.000 quejas, ha realizado 40 informes especiales y ha atendido a más de 100.000 personas. Chamizo ofreció estos datos durante su comparecencia ante el pleno del Parlamento para presentar el informe anual correspondiente a la gestión realizada en 2007, ejercicio en el que las quejas aumentaron un 2% hasta situarse en 5.685, lo que confirma una tendencia moderada de crecimiento.
Los grupos de la oposición respaldaron la conveniencia de impulsar una nueva ley reguladora de la institución, mientras que el PSOE, que recordó que el nuevo Estatuto recoge más derechos sociales, aseguró que, en la mayoría de los casos, se da respuesta a las quejas de los ciudadanos.
Educación, con 652 reclamaciones, Medio Ambiente (531) y Salud (472) acaparan el mayor número en 2007, año en el que las quejas de oficio aumentaron hasta alcanzar las 337 iniciadas. El pasado año se elaboraron, además, varios informes especiales sobre menores con trastornos de conducta, la atención a las personas mayores dependientes y una guía de los derechos de los usuarios de las tecnologías de la información.
Entre las quejas más significativas, Chamizo alertó de las posibles consecuencias lesivas de recintos como los botellódromos para la salud de los menores; la carencia de recursos sanitarios para afrontar el tratamiento de menores con transtornos de conducta y los retrasos de la Justicia.