El presidente del Parlamento andaluz, Manuel Gracia, recibió ayer al Defensor del Pueblo José Chamizo.
Al constatar la situación extrema que han sufrido las familias andaluzas a lo largo de 2012, el Defensor del Pueblo andaluz ha endurecido el nivel de sus reclamaciones. José Chamizo lanzó ayer una batería de propuestas a las administraciones públicas, entre ellas, exigir a las entidades bancarias que todas las viviendas protegidas de las que son titulares se ofrezcan al menos en alquiler, una medida que la propia Junta intenta vender a los bancos afincados en esta comunidad. Pero si se negasen, como parece que está ocurriendo, el Defensor propuso que la administración se tiene que plantear la expropiación.
La falta de oxígeno en la economía de las familias andaluzas ha hecho aumentar en casi un millar el número de peticiones de ayuda que llegan a la oficina de Chamizo (7.239 quejas en 2012 frente a las 6.303 de 2011). El Defensor ha tratado de buscar una solución estructural a los problemas más habituales de los andaluces y, viendo que todos tienen como denominador común la falta de liquidez, ha propuesto al Gobierno andaluz que legisle para dar más tiempo a las familias para saldar sus deudas. Chamizo reclama a la Junta que diseñe una ley que permita a los deudores pagar sus deudas de forma ordenada y en plazos razonables. Ley de segunda oportunidad, la bautizó.
También propuso compaginar esta norma con la puesta en marcha de un fondo especial de solidaridad social destinado a dotar de un mínimo de financiación a los recursos públicos y privados, dirigida a la atención de los colectivos sociales más perjudicados por la crisis económica. El Defensor desgranó ambas propuestas durante la presentación del Informe, correspondiente a 2012, que entregó ayer al presidente del Parlamento, Manuel Gracia.
Chamizo explicó que el año pasado se cruzó una línea roja. Derechos sociales que antes parecían estar al margen han quedado cuestionados por problemas financieros, dijo, en referencia a la educación y la sanidad. Las consecuencias derivadas de la austeridad y recortes del gasto público ponen de manifiesto que ya no quedan espacios exentos de reducciones, por eso nos da miedo que puedan tocarse estos dos pilares básicos de la igualdad social, dijo, acompañando una crítica feroz a los salvajes de las instituciones europeas que brindan con champán cada vez que se aprueba aquí algún recorte, informa Europa Press.
Traición. El Defensor alertó de que en la sociedad andaluza hay unos índices de desempleo nunca vistos, una sociedad empobrecida y una clase media que empieza a estar agotada soportando el peso de la crisis, por lo tanto, hay una población más crispada, más rebelde y más dispuesta a manifestar su disconformidad y su protesta por las consecuencias de las decisiones dentro de las políticas de ajuste. Ante esta situación, el Defensor insta a escuchar las voces de la sociedad que está pidiendo cambios radicales en la legislación hipotecaria frente a los desahucios. Si no es así, evidentemente, llegaremos a una rebelión social, concluyó.
Al ser cuestionado sobre si ahora que los partidos se van a sentar en breve para negociar un nuevo director general de la RTVA sería la oportunidad para negociar un nuevo Defensor, en funciones desde hace un año, Chamizo aseguró que le parecería lamentable irse en plena crisis económica, porque la gente lo entendería como una traición.
