L.A.L.
La reacción emprendida por el equipo de su mano no impide a Paco Chaparro ser consciente de que la plantilla, lógicamente, es mejorable, de ahí que piense reunirse con Manuel Ruiz de Lopera en cuestión de días. Además, se acerca el derbi... "Hace mucho que no ganamos allí", recuerda.
La plantilla disfruta de las cortas vacaciones navideñas desde la madrugada del domingo, pero su entrenador apenas descansa. Al margen de lo que maquine de cara al mercado invernal, Paco Chaparro ha ofrecido dos entrevistas en los últimos días, una a los medios del club y otra a Europa Press, en las que deja caer que sus planes pasan por hacer cambios en la plantilla. "En los próximos días vamos a reunirnos con el consejero delegado para ofrecerle nuestro parecer de la actual plantilla. Entre todos intentaremos perfilar el nuevo año y analizar la situación del equipo", adelanta el trianero, que por ahora prefiere no hablar de posibles refuerzos:"Los que tengo son los que están. Si cuando llegue el instante hay que hablar, se hablará y diremos lo que tengamos que decir", añade.
En estas horas finales del año, Chaparro también reflexiona sobre la progresión del Betis bajo su mandato. "El vestuario estaba cabizbajo y en una muy mala situación porque no ganaba. El equipo estaba triste y no sabía por qué no ganaba los partidos, pero ahora ha experimentado la misma revolución que han tenido los resultados. En esa misma medida ha crecido la caseta", dice el técnico verdiblanco, para quien su conjunto "tiene mucho potencial". "Parecía oculto, aunque poco a poco va saliendo a relucir. Podemos estar bastante satisfechos, conseguir siete puntos de nueve es un buen bagaje, teniendo en cuenta que estábamos a cuatro puntos de la salvación hace pocas semanas. También hay que tener en cuenta que dos de estos tres encuentros han sido fuera de casa", recuerda Chaparro, muy convencido de que logrará la permanencia: "Sí, sin ninguna duda, porque si no fuera así yo no me habría hecho cargo", asegura.
La mejoría del Betis tendrá un muy duro examen cuando se reanude la Liga. Le espera el Sevilla, también en clara progresión: "No será fácil. Además, hace mucho tiempo que el Betis no gana en el Pizjuán [desde el 0-3 de la campaña 96-97], así que el partido no va a ser fácil, pero ya nos lo pensaremos, a ver cómo llega el equipo", indica.
En Nervión, por cierto, habrá un curioso duelo entre entrenadores canteranos (Paco Chaparro contra Manolo Jiménez): "Somos dos entrenadores de la casa que llevamos mucho tiempo trabajando en la cantera y tenemos conocimiento de lo que ocurre en Sevilla si el partido no se te da bien, así es que Jiménez también pondrá todos los medios posibles para no perderlo", supone.
De todas formas, el primer encuentro de 2008 no será ese sino el de Copa ante el Elche. "La gente se va de vacaciones y este descanso nos va a venir muy mal -reconoce-, porque tenemos muy poco tiempo para trabajar y luego ya nos viene seguido el mes de enero. Esa semana será movida, como todas las de derbis".
a la segunda... Chaparro ya estuvo cerca de ser entrenador del Betis en 2000, después del ascenso logrado en Jaén, cuando él era ayudante de Luis del Sol. El ex futbolista fue precisamente quien se lo propuso a Lopera, que al final eligió a Juande Ramos. "Yo estaba preparado, pero el club era el que decidía y no tuve más remedio que aceptar lo que se decidió. Ahora se ha presentado esta ocasión y es cuando estoy demostrando que sí, que estaba preparado", remarca.
Esa preparación, aunque lo anecdótico prime sobre lo importante de puertas para fuera, no se reduce al uso de canciones como el ya archifamoso Resistiré del Dúo Dinámico: "El entrenador tiene la obligación de crear un ambiente de esfuerzo, trabajo y rendimiento, y ayudado por la psicología se consiguen los resultados. Eso es lo que he hecho, crear ese ambiente, e indudablemente está dando sus frutos. También pretendo que la gente tenga confianza y, cuando lleguen malos resultados, siga es
