I. Morillo / I. Carretero
Con el discurso de Manuel Chaves en la mañana de hoy en el Parlamento andaluz arranca el debate de su sexta investidura, que culminará mañana. El todavía candidato a presidir la Junta tiene previsto, entre otras ofertas a la oposición, proponerles consenso sobre la reforma del sistema judicial.
Los fallos judiciales del caso de Santiago del Valle (el presunto asesino de la niña Mari Luz Cortés) han abierto el debate sobre las carencias del sistema y han llevado a muchos profesionales a alzar la voz: el colapso del sistema, dijo la Junta de Jueces de Sevilla, hace inevitables este tipo de errores. Manuel Chaves tiene previsto ofrecer en su discurso de investidura en el Parlamento andaluz un pacto a la oposición para reformar la justicia en Andalucía. Su propuesta pasa por alcanzar un acuerdo sobre la nueva planta judicial de Andalucía, un plan de calidad que mejore el servicio y la puesta en marcha del Consejo de Justicia, un órgano previsto en el nuevo Estatuto de Autonomía y que está concebido para dirigir la Administración de Justicia.
La propuesta de Chaves se produce después de que el PSOE haya hecho pública en el Congreso su determinación de pactar cuanto antes con el PP una reforma de la Ley Orgánica del Poder Judicial. Ese cambio del marco legal es imprescindible para que pueda empezar a funcionar en Andalucía el Consejo de Justicia, cuyas atribuciones están pendientes de lo que establezca la ley estatal. El Estatuto ya dice que el nuevo órgano participaría en la designación del presidente del TSJA, en los nombramientos y ceses de los jueces incorporados de forma temporal a la carrera y, entre otras competencias, tendría funciones disciplinarias.
Ese margen de maniobra fue acordado en su día por el PSOE con los dos grupos que actualmente conforman la oposición, a los que Chaves quiere implicar ahora en la puesta en marcha del Consejo. La oferta, según las citadas fuentes, irá más allá ya que el candidato a ser investido como presidente de la Junta se mostrará abierto a tomar todas las iniciativas que sean necesarias para que la Justicia esté a la altura, aseguraron las fuentes, de una sociedad moderna. En sus palabras irá implícita la autocrítica sobre el funcionamiento del sistema.
La propuesta del presidente excede las competencias de la Junta, aunque lo que pretende es forjar un consenso andaluz que permita definir la nueva planta judicial de la comunidad: cuántos juzgados son necesarios atendiendo a las necesidades reales de población y a la litigiosidad.
A lo largo de la nueva legislatura, según las fuentes, el Gobierno andaluz tiene previsto poner en servicio más de 20 nuevas infraestructuras judiciales en las capitales y grandes ciudades.
