Las declaraciones de altos representantes políticos, como los ministros de deportes de República Checa o Bélgica asegurando que no acudirán a los JJOO, son, según China, un problema de sus respectivos Comités Olímpicos Nacionles (CONs), no de Pekín.
"El Comité Olímpico Internacional y el BOCOG (Comité Organizador de Pekín 2008) envían invitaciones a los CONs y les dice que pueden invitar a la ceremonia de inauguración a representantes reales, jefes de estado, primeros ministros y ministros de deportes y ellos deciden a quién van a traer", dijo hoy el portavoz del ministerio chino de Asuntos Exteriores Qin Gang.
Qin expresó de este modo que no se puede llamar boicot a los Juegos a la renuncia individual de determinados cargos políticos de asistir a la ceremonia de inauguración.
"Las declaraciones de las figuras políticas son una respuesta a los Comités Olímpicos Nacionales de sus países", añadió el portavoz.
"Aquellos huéspedes distinguidos que sean invitados serán bienvenidos y bien recibidos por China", concluyó, antes de repetir que desea que el evento deportivo sea todo un éxito.