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Chiringuitos

En Sevilla no hay chiringuitos de playa, porque en Sevilla no hay playa. Pero sí hay de los otros, de los del pelotazo, de los de ganar mucho dinero en poco tiempo, de los de las influencias, porque esa es la industria auxiliar de toda Administración despreocupada de lo que acontece alrededor de ella misma.

el 16 sep 2009 / 00:40 h.

En Sevilla no hay chiringuitos de playa, porque en Sevilla no hay playa. Pero sí hay de los otros, de los del pelotazo, de los de ganar mucho dinero en poco tiempo, de los de las influencias, porque esa es la industria auxiliar de toda Administración despreocupada de lo que acontece alrededor de ella misma. En Madrid hay más chiringuitos, porque hay más Administración.

En puridad, un chiringuito es un lugar de servicios prestados al ocio. En Zaragoza hay un chiringuito en medio del parque grande, donde la gente se pone al sol y toma refrescos con patatas fritas. En Zaragoza tampoco hay playa.

Antes, los chiringuitos de Sevilla tenían un cine de verano. Se acabó el cine, pero siguen los chiringuitos. Yo voy mucho a uno que hay en San Diego, núcleo residencial donde los haya, en el que se practica la vida social ácrata: es como el Labradores o el Mercantil, pero sin junta directiva. Los socios, además no pagan cuota.

El chiringuito es un sitio de encuentro. En los tiempos del Quijote se le llamaba venta y ahora se le sigue llamando así, si están al lado del camino. La particularidad del chiringuito de playa es que puedes entrar a refrescarte sin cambiar la ropa de baño por el Fred Perry, que ya no sé ni si los hacen.

Para mantener un chiringuito de carretera hay que mantener la carretera: el dueño del chiringuito se encarga de ofrecer el servicio. Para mantener el chiringuito de barrio hay que mantener el barrio: el dueño del chiringuito se encarga de lo demás. Para mantener el chiringuito de playa hay que mantener la playa. Pero como eso es muy caro, mejor prohibimos los chiringuitos y los mandamos al otro lado del paseo marítimo. Y dejamos las playas muertas, sin arena, sin hamacas, sin duchas, sin servicios, sin chiringuitos, sin turistas. Lo que se dice una playa virgen.

En Andalucía, cuando hay un bache en la carretera se pone un cartel de velocidad máxima a 60 Km/h, que sale más barato. En las playas, cuando el temporal se lleva la arena por culpa de las construcciones permitidas por la Administración, se prohiben los chiringuitos. Es más barato.

Consultor de comunicación

isidro@cuberos.com

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