El juzgado de Instrucción 3 de Granada ha archivado las diligencias previas abiertas sobre el caso del turista madrileño que permaneció cinco días encarcelado por error en la capital granadina durante la Semana Santa, al ser confundido con un delincuente. El hombre fue invitado en el Corpus a la ciudad, donde lo nombraron embajador honorario de Granada.
En su resolución, de la que informó ayer el Tribunal Superior de Justicia de Andalucía, el juzgado -de guardia el día de los hechos- concluye que no hay indicios de la comisión de delitos tipificados en el Código Penal. El juez, que abrió diligencias penales por la presunta comisión de los delitos de detención ilegal y falsedad, deja no obstante abierta la posibilidad de que el perjudicado, Juan Enrique Tena, reclame por la vía administrativa.
La representación del afectado aún no ha decidido si recurrirá el auto, pero tiene claro que reclamará una cuantía aún por fijar, al entender que en este asunto hay una "clara" responsabilidad de las administraciones públicas. Además, va a pedir en el Congreso un cambio en las leyes para "que amparen al inocente".
El turista, vecino de la localidad madrileña de Griñón, fue enviado a prisión el Jueves Santo tras comprobar que sus datos coincidían con los de la orden de búsqueda que presentó ante el juez la Policía Nacional, que lo detuvo en el hotel en el que se hospedaba. Sin embargo, el turista sólo compartía el primer apellido con el titular del requerimiento original emitido por la Audiencia Nacional. Al tratarse de un día festivo, el juzgado no pudo comprobar los datos con la Audiencia, verificación que no se realizó hasta el lunes siguiente. Tanto la Audiencia Nacional como el TSJA entendieron previamente que no había delito sino celo profesional de los policías y jueces.
