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Cierran el parque infantil de la Alameda al caerle una gran rama

Las fuertes rachas de viento provocaron la fractura de un árbol sobre la zona de juegos para niños

el 08 nov 2009 / 18:49 h.

Un pequeño observa la rama caída sobre la zona de juegos

Las rachas de fuerte viento que soplaron desde el mediodía de ayer en Sevilla tuvieron la culpa. Una gigantesca rama de un árbol de gran porte cayó repentinamente sobre una zona de juegos infantiles en la Alameda de Hércules sin causar daños, milagrosamente, a los numerosos niños que se divertían en ella.

Según el relato de algunos testigos presenciales, el suceso se produjo en torno a las 16.00 horas, cuando al menos una veintena de niños se entretenía jugando en esta nueva zona de juegos infantiles situada frente a la comisaría de Policía Nacional, junto a la fuente del bulevar.

El susto fue tremendo. Numerosos niños empezaron a gritar presos del pánico, mientras sus padres, que disfrutaban de la tarde en las terrazas y veladores de alrededor, corrían alarmados hacia el parque de juegos ante el temor de que algún pequeño hubiese sufrido heridas al quedar apresado bajo la rama.
Afortunadamente, la caída de la rama no provocó daños de consideración entre la chavalería que hacía uso de la zona de juegos. Toda una suerte ya que la rama en cuestión era, a decir de los testigos, "bastante larga y pesada y con dos ramificaciones".

Efectivos de la Policía Nacional llegaron al lugar de los hechos 20 minutos después. Los agentes desalojaron la zona de juegos, donde de nuevo varios niños se entretenían jugando sin temor a que pudiera repetirse el incidente, y clausuraron de forma temporal el parque infantil.

Cinco minutos después de la llegada de la Policía, acudió al lugar de los hechos un camión de Bomberos, que procedió a cortar la rama en trozos pequeños y a retirarla de la zona infantil.

Según el testimonio de algunos padres, fueron las rachas de viento que azotaron ayer a la capital las que provocaron la fractura en la arboleda y la posterior caída de la rama. Un viento que hacía volar los objetos menos pesados de los veladores de la zona y que alfombró de hojas secas el pavimento del bulevar.

Según fuentes de la Agencia Estatal de Meteorología (Aemet) consultadas por este periódico, las rachas de viento del noroeste registradas ayer en Sevilla estaban muy lejos del umbral de aviso amarillo, situado en los 70 kilómetros por hora. En concreto, las rachas más altas se registraron en el aeropuerto de San Pablo, donde el viento sopló a una velocidad de 30 nudos, es decir, algo más de 50 kilómetros por hora, aunque no se descarta que localmente pudieran registrarse rachas superiores.

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