Las 15.391 oficinas electorales habilitadas para los comicios legislativos adelantados en Bélgica cerraron a las tres de la tarde (13.00 GMT), tras una jornada electoral marcada por la tranquilidad.
No se han producido mayores contratiempos durante la jornada, más allá de algún incidente como el registrado en el municipio de Rhode-Saint-Genèse poco antes de las once de la mañana, cuando se disponía a votar el presidente del Consejo Europeo y ex primer ministro belga, Herman Van Rompuy.
En ese momento, una veintena de militantes independentistas han desplegado pancartas con leyendas del estilo "Dennos un presidente flamenco" o "Basta, simplemente, dividámonos".
En el resto del distrito de Bruselas-Halle-Vilvoorde (BHV), el proceso de votación ha transcurrido con normalidad pese a la negativa de los concejales de 17 comunas a organizar la votación, en protesta por el fracaso de las negociaciones para pactar la escisión del distrito, ha informado la agencia Belga.
Sólo uno de los impulsores de la rebelión de concejales, el burgomaestre de Lennik, Willy De Waele (de los liberales flamencos del Open Vld), acudió a la oficina electoral y luego se negó a votar, por considerar que las elecciones legislativas en el distrito son ilegales.
La polémica división de esta circunscripción electoral -que engloba a la capital y a varios municipios de la periferia, situados en territorio flamenco-, es motivo de enfrentamiento entre las dos grandes comunidades lingüísticas del país desde hace más de 40 años, y provocó la convocatoria de las elecciones anticipadas que se celebran hoy.
La división de BHV fue ordenada por el Tribunal Constitucional en 2003, pero los partidos políticos no han logrado llegar a un acuerdo sobre cómo hacerlo desde entonces, debido a las diferencias sobre los derechos de unos 150.000 francófonos que viven en municipios de la periferia flamenca de Bruselas (una región bilingüe) y que hasta ahora pueden votar por listas flamencas y francófonas.
Por otro lado, los profesionales contratados por el Gobierno para solucionar los problemas técnicos que pudieran surgir durante la jornada electoral habían efectuado 335 "intervenciones sin importancia" hasta las dos del mediodía, según informa el blog electoral del Ministerio del Interior.
Más de siete millones de electores estaban convocados a las urnas en la jornada de hoy para elegir a 150 diputados y 40 senadores de elección directa.
Unos 12.000 de ellos, residentes en el exterior, votaron entre el viernes y el sábado en las embajadas y consulados de Bélgica en todo el mundo, lo que representa el 31% de los 42.000 electores convocados a las urnas en el extranjero.
Además, se calcula que unas 19.000 personas han enviado su sufragio por correo, lo que supone una disminución del 15% respecto a las anteriores elecciones.
Una vez cerrados los colegios electorales y cuando se conozcan los resultados, el verdadero trabajo comenzará mañana, cuando las fuerzas inicien los contactos para formar Gobierno, un proceso que llevó nueve meses al primer ministro saliente, el democristiano flamenco (CD&V) Yves Leterme, tras los comicios de junio de 2007.
