Desde que el 15 de noviembre se inició una campaña para evitar la venta ilegal de material pirotécnico se han registrado cinco denuncias a este respecto en la provincia y se han incautado 75.000 de estos productos. La campaña se intensificará hasta enero.
La Subdelegación del Gobierno en la provincia de Sevilla presentó ayer la campaña que inició el pasado 15 de noviembre para prevenir la venta y distribución ilegal de material pirotécnico, y que se ha intensificado esta misma semana hasta la primera semana de enero, dada la proximidad de las fechas navideñas. No obstante, las inspecciones a locales se incrementarán aún más el 28 y 31 de diciembre, días en los que tradicionalmente se recurre al uso de este material.
Según los datos ofrecidos por el subdelegado, Faustino Valdés, desde que se iniciara esta campaña hace un mes y medio se han registrado cinco denuncias por la venta ilegal de material pirotécnico, fruto de las 80 inspecciones que tanto la Guardia Civil como la Policía Local de los distintos municipios han llevado a cabo. De estas actuaciones, 65 se han realizado en quioscos, "donde es habitual la venta ilegal de estos productos", y han dado como resultado la incautación de más de 75.000 productos -60.000 por parte de la Guardia Civil y 15.000 por parte de la Policía Local-.
La mayoría de los cohetes y petardos intervenidos se han localizado en mercadillos y puestos de golosinas de la provincia. En este sentido, la mayor actuación hasta el momento se ha efectuado en Osuna, donde la Guardia Civil llegó a intervenir más de 53.000 objetos en un local.
En la presentación de la campaña Valdés recordó que en la provincia sólo hay 11 establecimientos autorizados para la venta de estos productos -siete de ellos en Sevilla capital y cuatro más en Umbrete, Lebrija, Mairena del Aljarafe y Benacazón- con los que el subdelegado mantuvo ayer una reunión. Así, recomendó a los usuarios adquirir estos productos en estos locales e insistió en el peligro que entraña su uso "especialmente cuando se trata de menores".