Es la mayor operación contra el contrabando de tabaco de los últimos cinco años en la provincia de Sevilla. La Guardia Civil informó de la detención de cinco presuntos integrantes de dos clanes dedicados al contrabando de tabaco, uno de los cuales abastecía al otro. La operación se prolongó durante un año y permitió la incautación de 33.060 cajetillas de tabaco y cuatro coches.
En septiembre de 2009 la Guardia Civil tuvo conocimiento de que podría existir esta organización y contactó con los estanqueros de Utrera, que confirmaron que estaban sufriendo pérdidas notables en sus ventas.
Los investigadores sospecharon que el cabecilla del clan podría ser F.C.C., con numerosos antecedentes por ese mismo motivo. La familia tenía un quiosco donde vendía tabaco pero, como consecuencia de las numerosas inspecciones, empezó a hacerlo en su propia vivienda, donde los agentes observaron como numerosas personas se acercaban por la puerta de atrás y se llevaban cartones de tabaco, llegando a haber hasta colas. Se producía la venta de cuatro cajas de tabaco al día, lo que significaría 27.000 euros de beneficios al mes.
Los agentes siguieron con las pesquisas, dando un paso más y llegando a A.P.S., un vecino de Paradas que es el presunto cabecilla de otro clan que supuestamente abastecía al de Utrera y a gran parte de la provincia. Esta persona vivía en un gran chalé y con gastos muy por encima de sus posibilidades, ya que estaba en paro, por lo que la Guardia Civil acabó deteniéndolo. F.C.C., también fue detenido junto a su mujer, su hija y un cuñado.
