Un año más, Olivares se coloca el cartel de localidad amiga de la música antigua para ejercer de anfitriona de un festival que, año tras año -y ya van 16-, sigue manteniendo el pulso pese a la dichosa crisis, que tantas iniciativas culturales se ha llevado por delante.
Por suerte, la XVI Muestra de Música Antigua de Olivares la ha capeado un año más con la ayuda de sus cuatro puntales: el Ayuntamiento, que es el organizador; y los patrocinios de la Junta de Andalucía, la Diputación y la Obra Social de Cajasol.
Cierto es que hace unos años el nivel del cartel era mucho más lustroso, con grupos de bastante peso que concitaban la atención de los melómanos más exacerbados y, por ende, de los críticos, pero el programa abrochado para esta edición que hoy arranca, aunque más modesto en cuanto a los cachés, mantiene una línea interesante y correcta, y no ha perdido peso específico con respecto al del año pasado.
Así las cosas, por el Teatro Municipal de Olivares pasará este viernes la formación Música Mensurabilis y Ministerium, que ofrecerá el programa El esplendor del contrapunto, englobado en el repertorio del Renacimiento musical español.
El sábado le llegará el turno a La Ritirata, que bajo el título de Chiaroscuro, propondrá un viaje a través de los diferentes estilos nacionales de la música barroca.
Y el domingo 31, último día de la Muestra, cerrará el evento la Capilla Antigua de Chinchilla con el programa El arpa de Tristán, basado en la música medieval artúrica.
Todos los conciertos empezarán a las 21.00 horas y las entradas pueden adquirirse al precio único de 6 euros en la taquilla, o previa reserva en el teléfono 954 110 005. Más información sobre la trayectoria de los grupos y las piezas que interpretarán en la web www.turismo-olivares.es.
Una de las virtudes de la Muestra de Música Antigua que con tanta ilusión preparan cada año en Olivares estriba en que no han perdido de vista su labor divulgativa. Es decir, la música antigua, elitista y por lo tanto no al alcance ni del gusto de todos los oídos, es de por sí un fenómeno de consumo minoritario. Pero educa y sosiega tan bien el alma del ser humano que casi que debería prescribirse como antídoto frente al estrés y las prisas que vivimos a diario en la sociedad.
Pues bien, mientras llega esa prescripción simbólica, lo que no faltarán en Olivares será cantera para la música antigua. Otra edición más, se han programado conciertos pedagógicos especiales para los más pequeños, al objeto de ir educándoles el oído para percibir los sones de unas composiciones con mucha historia y que suenan, obviamente, a antiguo.
El primero de esos conciertos para escolares es hoy y de él se beneficiarán 350 alumnos de Primero, Segundo y Tercero de Educación Primaria. Lleva por título El palacio de la música y les brindará las claves para familiarizarse con los instrumentos, su historia y los sonidos que emiten.
Mañana jueves será el segundo concierto didáctico, en este caso dirigido a 300 niños de Cuarto, Quinto y Sexto de Primaria. Se titula Sones y danzas del Renacimiento. Los ministriles, familias de instrumentos de viento.
También el jueves (a las 21.00 horas, Palacio del Conde Duque) se impartirá, para los adultos, la conferencia El cornetto, ese maravilloso aunque desconocido instrumento del Renacimiento, a cargo Joaquín leal de la Orden.