Lo que nunca se me hubiera ocurrido se ha hecho realidad: anoche, sobre las 23.50 horas, sonaba mi móvil y cometí el error de descolgarlo; era Fray Equis, jurista de reconocido prestigio, hombre sabio y prudente y, por supuesto, confidente mío, adscrito a la Vicaria de Laicos: "Font, no te lo vas a creer, en una reunión secreta entre Consejo y Palacio han cortado los problemas de raíz, 70 cofradías, si he dicho bien, 70 hermandades van a entrar en Campana este año 2009; siete jornadas a diez hermandades por día y, agárrate, por sorteo riguroso de todas. Nada de días clásicos ni derechos históricos de corporaciones antiguas o señeras, es decir, si el bombo lo quiere, junto con el Silencio, Negritos, Santo Entierro o Pasión pueden ir las más modernas cofradías del extrarradio; todas, absolutamente todas, tienen los mismos derechos y, esto es lo mejor, la subvención no va a ser por numero de pasos, sino por el de nazarenos; siendo mayor las que menos tengan, pues contra más escasez de recursos humanos, más necesidades se pasa, ya que una banda o un frisito de flores cuesta lo mismo para una cofradía de dos mil nazarenos que para otra de trescientos." Como comprenderán que Mercedes, mi primera mujer, asustada acudió al pasillo, donde me habían petrificado, y al verme la cara, haciéndome una tila y me diluyo un Eferelgan de un gramo en un vasito de agua. No pudiendo conciliar el sueño, llame a mis hermanos mayores, pero todos estaban fuera de cobertura.
José María Font es abogado
