¡Javierre! Carlos Amigo Vallejo. Cardenal de Sevilla.
"Eras un magnifico conversador. A tu lado el tiempo no contaba. Nos encandilabas con tus ideas y tus anécdotas. Nunca había un atisbo de crítica negativa, ni de amargura nostálgica. Todo era actualidad y deseo de bien. Tu pluma, ágil y elevada, como la de los que saben volar por las alturas del misterio, subías a los cielos, hablabas con Dios de los trajines que nos entretenían a los humanos y después nos lo contabas en buena conversación a los hombres. (...)
De las aventuras en esa maravillosa ruta del periodismo podrás escribir todo un tratado sobre libertad de expresión, de conflictos administrativos, de economías insuficientes, de zancadillas y empujones, de manos tendidas que saben ayudar a comprender y a valorar la noticia, de haber sido discípulo aventajado de tus maestros y saber ayudar a los que llegaban. Tienes que reconocer que, como periodista fuiste un poco a tu modo. Nunca te encadenaste a interés alguno"...
Javierre, el cura del cambio. José Antonio Griñán, presidente de la Junta de Andalucía.
José María Javierre vivió y trabajó con ese mismo gusto por tender puentes y buscar espacios de encuentro que de forma tan significativa caracterizó a muchos sacerdotes y a una parte de la Iglesia durante la transición a la democracia.
Uno de esos puentes, uno de esos espacios de encuentro, se concretó durante su labor al frente del decano de la prensa, en aquellos años difíciles en que algunos medios de comunicación se adelantaron como punta de lanza a la vanguardia de la conquista de la libertad.
Javierre, un 'cura pa tó'. José Rodríguez de la Borbolla. presidente del consejo editorial de El Correo de Andalucía y ex presidente de Andalucía.
"Me dí cuenta de que, además de los jesuitas, estaba Javierre. Javierre, por sí solo, era capaz de desempeñar el papel de todos los tipos de cura que uno pueda imaginarse en todas las latitudes que fuera necesario. Un cura de arriba y de abajo, del Norte y del Sur, del Este y del Oeste. Un cura de manos impolutas que escribía vidas de santos y de beatos y un cura con los zapatos manchados del barro de los más diversos conflictos"...
En el peor momento pero en el mejor lugar. Manuel Chaves González, Vicepresidente Tercero del Gobierno y Ministro de Política Territorial
"Como en tantas otros aspectos de la vida, el cura Javierre supo ver donde muchos otros no veían. Supo atisbar la necesidad de que la Iglesia se fuera posicionando, en la medida de sus posibilidades, del lado de quienes apostaban por la paz, y no por el enfrentamiento. Del lado de la justicia, y no de la lacerante desigualdad de la que daban fe -fe periodística y seguramente Fe con mayúsculas para él- las páginas laborales de El Correo. Del lado de la libertad y no del lado de las sanciones, las amenazas y los secuestros, que son las circunstancias que rodearon a EL CORREO DE ANDALUCIA durante muchos de los días en los que el cura Javierre estuvo al frente de él en su primera etapa, aun durante la dictadura".
Jose María Javierre: El cura bueno. Alfredo Sánchez Monteseirín, alcalde de Sevilla.
"No se cansaba de repetirnos el cura Javierre que su amigos no le dejaban morirse.Y es que eran muchos y de muy distinta condición y pensamiento. Porque don Jose María, salvo para los de donjosemaría y los del nacional-catolicismo, que lo tildaron de cura rojo o de tonto útil para los compañeros de viaje, era para los creyentes un hombre, un sacerdote, un periodista(...)Nos contaba sus duras experiencias vividas como director de El Correo de Andalucía -teniendo que sorportar las amenazas, la represión, el miedo de los que muchos de nosotros fuimos jóvenes testigos- como si fueran aventuras, anécdotas sin mayor relevancia hoy, una vez superada la iniquidad de la dictadura y la opresión de la época".
Comprometido y libre. Nani Carvajal, presidenta de la Asociación de la Prensa de Sevilla.
"En su primera etapa (1969), estando el periódico sin empresa, sin dinero, sin medios técnicos y humanos, el sacerdote y periodista supo convertir las páginas del decano en plataforma de defensa de los derechos humanos y las libertades, hasta tal punto que el Gobernador Militar llegó a amenazarlo con "meter los tanques en el patio del periódico". A su vez, y con una montaña de expedientes, el Tribunal de Orden Público trató de aburrirlo, o mejor dicho de callarlo, pero no consiguieron mermar la osadía de Javierre. (...)La Junta Directiva de la Asociación de la Prensa de Sevilla había acordado por unanimidad hace bien pocos días sumarse a la iniciativa de este periódico de elevar a la Junta de Andalucía la propuesta del Padre Javierre para una de las distinciones que se conceden con motivo del día de nuestra comunidad".
Todo sobre mi madre. Francisca Godoy, subdirectora de El Correo de Andalucía.
El cura Javierre llevaba los zapatos gastados cosidos con grapas de oficina aquella mañana en que me llamó a su despacho para hacerme un encargo de trabajo. Después de haber sido becaria, yo era entonces ayudante de redacción y un poco de lo que se ofreciera, porque en aquel Correo de los ochenta éramos pocos y mal equipados. Javierre, recién llegado a la dirección del periódico, se sentó y cruzó las piernas agarrándose el vuelo del pantalón y, cuando me percaté del arreglo que se había hecho en los zapatos me pareció un cura de lo más progre, con aquel aspecto de científico loco...
El cura Javierre ha muerto. Isidoro Moreno, catedrático de Antropología de la Universidad de Sevilla.
(...)El diario sevillano llegó a formar parte, indigesta, del diario desayuno de los ministros de Información de la dictadura. José María Javierre fue uno de los responsables -si no el responsable principal- de la revolución producida en un periódico que desde ser de provinciana sacristía pasó a convertirse en referente de obligada lectura para obreros, estudiantes y cuantos aspiraban a un futuro democrático para Sevilla, Andalucía y España.
Esta época no era ya la suya. Ni en la Iglesia, en aquel momento abierta tras el Vaticano II y decidida a soltar amarras con el franquismo pero ahora sujeta a un proceso de involución acelerada que la está conduciendo a la defensa fundamentalista de una anacrónica sharía católica; ni en la política...
José María Javierre, director. Antonio Lorca, director de comunicación de la CEA.
"No fueron buenos tiempos ni para él ni para los que trabajábamos en el periódico. La situación era más grave que los de dentro, acostumbrados a las penurias, imaginábamos. Y apareció José María con dos objetivos inmediatos que parecían difícilmente alcanzables: hacer un buen periódico, -los medios humanos y técnicos eran muy escasos-, y sanear las muy maltrechas cuentas del periódico (...)
Conocí, entonces, el famoso mal genio de José María. Debo ser el único periodista del mundo que ha recibido broncas nocturnas desde la habitación contigua a los aposentos del Papa. ‘No me hagas levantar la voz', me decía, ‘que tengo al Papa al lado'. ‘Pues no grites, que lo vas a despertar' ".
Javierre. Guillermo J. Jiménez Sánchez, vicepresidente del Tribunal Constitucional.
"Un grupo de, entonces todavía jóvenes, sevillanos nos incorporamos al ilusionante proyecto de abrir un nuevo cauce de libertad de expresión en las páginas del decano de la prensa de nuestra ciudad: El Correo de Andalucía.
No fue empresa fácil. Los estrechos límites que marcaba el "orden público" de un régimen autoritario exigían a los redactores y a los colaboradores de cada número extraordinarios e imaginativos esfuerzos para saber decir lo que debían y querían decir sin provocar el cierre de una edición, o incluso el final del rotativo. Se conseguía el milagro un día tras otro..."
Javierre se la jugaba. Juan Holgado Mejía, escritor y periodista.
" Javierre ejerció con maestría un periodismo valiente desde El Correo donde creó una escuela de buenos profesionales . Descanse en paz".
Don José Mª Javierre le dijo a Dios " Ya voy Señor...". Adolfo Arenas Castillo, presidente del CC.HH. y Cofradías.
"Las HH. Y CC. De Sevilla no perdieron la oportunidad de acercarse a ti, ¿o fue al revés?... Lo cierto es que en el año 1993, y siguiendo tu vocación de VOCERO de DIOS, fuiste Pregonero de la Semana Santa, estrenando para tal ocasión no solo el Teatro Maestranza sino también, y lo que es mas importante, la gran lección de tu mensaje a un pueblo que te reconocía y creía firmemente tus experiencias..."
Extractos de artículos que, en memoria de José María Javierre, se ofrecen íntegros en la edición impresa de El Correo de Andalucía del 18 de diciembre.
