Jóvenes participantes en la fiesta serrana.
En traje de baño, con cubos de agua y una temperatura que ascendía a casi 40 grados, los vecinos de Castilblanco de los Arroyos (Sevilla) han celebrado esta tarde la "Fiesta del Agua", que conmemora la puesta en funcionamiento hace 24 años del embalse que puso fin a los graves problemas de suministro.Más de mil vecinos, sobre todo jóvenes, han participado en esta singular "batalla", que ha tenido lugar en la llamada Plaza Amarilla, y en la que se han arrojado unos 70.000 litros de agua no potable procedente de un pozo municipal.
Esta fiesta se celebra desde 1986, cuando comenzó a funcionar el Embalse del Molino, cuya inauguración originó una "explosión de júbilo" entre los vecinos que, de forma espontánea, cogieron cubos y empezaron a arrojarse agua, ya que el nuevo pantano ponía fin a la grave escasez de suministro de agua que padecían, según ha explicado a Efe el concejal de Turismo y Festejos, Antonio Vela.
Los algo más de 5.000 vecinos de este municipio sevillano, situado a unos 35 kilómetros de la capital, participan desde entonces en la fiesta, que sólo se ha suspendido en dos ocasiones, a causa de la sequía, por el derroche de agua que supone.
Las lluvias registradas este año en la provincia de Sevilla han permitido que esta fiesta, que supone el "pistoletazo de salida" de la feria de Castilblanco, se celebre sin problema, pero no han "corrido la misma suerte" otros de los actos que se celebran desde hace décadas.
La crisis económica motivó que el equipo de gobierno formado por PSOE-PP decidiera suspender la mayoría de estas actividades, entre ellas la gala de elección de la Reina y Damas de Honor de las Fiestas o la suelta de toros de fuego y fuegos artificiales.
No obstante, según ha explicado Vela, se ha conseguido finalmente contar con una orquesta para amenizar la fiesta en la noche del próximo sábado, víspera de la salida en procesión de la patrona del pueblo, la Virgen de Gracia.
La crisis económica ha afectado de tal forma que los vecinos, para participar esta tarde en la fiesta del agua, han tenido que llevar sus propios cubos de plástico, unos recipientes que en ediciones anteriores eran facilitados por el ayuntamiento.
