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Con este Luis Fabiano todo es posible

El brasileño, autor de nueve goles en sus siete últimos partidos oficiales, vuelve a liderar a un Sevilla que se sitúa primero de grupo tras derrumbar al Unirea

el 27 sep 2009 / 21:28 h.

Suele decirse que hay partidos que sólo la calidad individual de un futbolista puede decantar, y el de ayer fue una buena muestra. Cuando parecía que el Unirea, serio, combativo y con orgullo hasta el final, podía mandar al Sevilla a vestuarios con dudas por sus problemas para derrumbar la muralla, apareció Luis Fabiano para tirarla de un plumazo. Su gol, un zapatazo ajustado al poste izquierdo desde la frontal del área, fue providencial. Su estado de gracia ayudó al equipo de Manolo Jiménez a firmar su primera victoria en esta fase de grupos justo cuando más feo pintaba el partido, porque hasta que él y su calidad aparecieron nadie lo había hecho.

El conjunto de Dan Petrescu vendió caro su pellejo; tanto, que prácticamente fue inasequible hasta que cometió su único error de toda la primera parte. En el minuto 46, en el único despiste hasta entonces, Fernando Navarro vio una caída de Renato a banda izquierda, éste recibió para poner el balón en la frontal del área y, allí, apareció Luis Fabiano -quién si no- para marcar el 1-0. Fue el principio del fin para el modesto equipo rumano.

Hasta cuatro cambios, repartidos por todas las líneas exceptuando la portería, introdujo Jiménez respecto al equipo que ganó al Zaragoza: dos nuevos laterales (Sergio Sánchez y Fernando Navarro), un extremo (Diego Capel) y un delantero (Kanouté). No jugó suelto el ex del Espanyol, más preocupado por defender que por atacar. Diego Capel, por su parte, le puso ganas para ganarse el puesto, buscó y buscó la pelota y al final, mientras estuvo en el campo, logró hacerse importante en el juego ofensivo. También Fernando Navarro mejoró respecto a su primer partido. Quien no estuvo demasiado fino fue Kanouté, víctima de la muralla del Unirea , hasta el punto de que sólo remató una vez mientras estuvo sobre el césped. Negredo terminó ocupando su puesto. No era el día de Fredy.

De todos modos, no estuvo brillante en ocasiones el Sevilla en la noche de ayer. Por mucho que tuvo la posesión del balón y por mucho que quiso, lo cierto es que fue incapaz de generar peligro real hasta romper el partido. Un par de disparos a puerta, incluido el del gol, fue su pobre bagaje ante un adversario que prácticamente no asustó a Palop.

Por todo ello, el gol de Luis Fabiano, que anda en plena racha, terminó decantando la balanza. Obligado a estirar líneas y a dejar más huecos, el Unirea tuvo que cambiar su planteamiento cuando menos lo esperaba, porque hasta entonces le funcionó.

OTRA CARA. Poco o nada cambiaron las cosas en el primer tramo de la segunda parte. El Sevilla continuó llevando todo el peso del juego y buscó el segundo gol, sabedor de que un 2-0 le aseguraría, sin duda, su primera victoria en esta fase de grupos de la Liga de Campeones.

Volcado en el campo rival, el equipo de Jiménez puso cerco con más ímpetu que nunca, ayudado por ese espaldarazo moral que supuso el 1-0 al filo del descanso cuando las cosas pintaban regular. Luis Fabiano no volvería a marcar, pero sí continuó interviniendo en el juego para beneficio de sus compañeros. Primero robó un balón dentro del área y se lo puso a Capel para que marcara casi a placer, sin éxito; luego, y con Negredo ya en el campo, cabeceó un saque de esquina al segundo palo que recogió allí Renato para marcar el 2-0. Era el ansiado gol de la tranquilidad.

A partir de ahí, la historia fue otra. Jesús Navas tuvo más presencia que nunca, Perotti buscó el gol por la izquierda, Zokora, incansable y bastión en defensa siempre, dejó su puesto a un Lolo al que se le ve con muchas ganas y experiencia acumulada... Pudo incluso terminar el encuentro en goleada de no ser por el poste, que repelió un disparo de Renato. Cuando el Sevilla al fin tuvo huecos, se sintió a gusto y despertó más que nunca los aplausos del respetable. Hasta entonces tuvo que trabajar y apretar los dientes. Ya lo había dicho Jiménez: era cuestión de tener paciencia.

 

FICHA TÉCNICA

2 - SEVILLA FC: Palop; Sergio Sánchez, Squillaci, Escudé, Fernando Navarro; Jesús Navas, Zokora (Lolo, m.76), Renato, Diego Capel (Perotti, m.55); Luis Fabiano y Kanouté (Negredo, m.63).

0 - UNIREA URZICENI: Arlauskis; Maftei, Galamaz, Mehmedovic, Brandán; Ricardo Vilana (Onofras, m.81); Frunza, Balan (Paraschiv, m.65), Apostol, Varga (Semedo, m.73); y Bilasco.

Goles: 1-0, m.46+: Luis Fabiano. 2-0, m.70: Renato.

Árbitro: Matteo Simone Trefoloni (ITA). Amonestó a los visitantes Mehmedovic (m.10), Frunza (m.26), Maftei (m.31) y Galamaz (m.54), y al local Zokora (m.72).

Incidencias: Partido de la primera jornada en el Grupo G de la Liga de Campeones. Disputado en el estadio Ramón Sánchez Pizjuán ante cerca de cuarenta mil espectadores. Terreno de juego en buenas condiciones.

 

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