A los gritos de "guerra, guerra, guerra, Roca no se cierra" , "esta batalla la vamos a ganar" o "más trabajo, menos corrupción" más de un millar de personas se manifestaron ayer por las calles de Sevilla -desde la puerta de la Diputación hasta la Plaza de España- para exigir a la multinacional de sanitarios que la factoría que tiene en Alcalá de Guadaíra siga abierta y mantenga los 228 puestos de trabajo.
Los empleados de esta firma ganaron el jueves una primera batalla al lograr in extremis que la empresa retirase el expediente de regulación de empleo (ERE) extintivo que había presentado el pasado 18 de diciembre, casi en plena Navidad. La plantilla lo que ha conseguido es más tiempo para seguir con las negociaciones, porque la firma, al mismo tiempo que les informó de la retirada del expediente, les anunció que presentará otro ERE más adelante, sin dar plazos.
Ante esta situación, los trabajadores han decidido no bajar la guardia y mantener todas las movilizaciones que tenían programadas, porque, tal y como manifestó ayer durante la manifestación el presidente del comité de empresa de la factoría sevillana, Juan Miguel Cuevas, "nos lo jugamos todo". Su objetivo es que se mantengan los 228 puestos de trabajo, porque, según remarcó, una indemnización no es ninguna solución para trabajadores de más de 45 años con la grave crisis que sufre el país. "Nos va la vida en conseguir que la fábrica siga abierta", remarcó.
Para lograr este objetivo cuentan con varios factores a su favor: la unión de la plantilla, el apoyo de la ciudadanía -en la manifestación de ayer había vecinos de Alcalá de Guadaíra, Arahal, Morón de la Frontera y hasta ciudadanos de Cádiz, Málaga, Madrid y Barcelona- y el respaldo de los sindicatos y de todos los partidos políticos sin excepción, cuyos representantes estuvieron ayer acompañando a los trabajadores durante la marcha.
Una de las personas que más se ha implicado y que más se ha movilizado para exigir que la planta de Alcalá de Guadaíra siga funcionando es el alcalde de este municipio y senador, el socialista Antonio Gutiérrez Limones, quien durante la protesta de ayer remarcó que es "injusto" que Roca plantee el cierre de la planta alcalareña, "cuando en época de bonanza obtuvo grandes beneficios". En este sentido, remarcó que la firma lo que tiene que presentar es un plan de viabilidad para la fábrica, porque, en opinión de Gutiérrez Limones, la planta sevillana tiene futuro.
Asimismo, indicó que esta próxima semana llevará la situación de Roca al Consejo de Europa, para buscar nuevos apoyos institucionales que eviten el cierre de la factoría. En este sentido, remarcó que en Europa no se puede permitir que se clausure una planta en España para trasladarla a Portugal, por lo que reiteró que se debe actuar, "y más cuando Roca es una de las empresas más rentables a nivel mundial". Si finalmente Roca cumple su amenaza, en opinión del alcalde de Alcalá de Guadaíra, cometería una "indecencia" y una "ingratitud", que merecería la "reprobación social".
En términos similares se pronunció su compañero de filas, el vicesecretario general del PSOE de Sevilla, Carmelo Gómez, quien calificó de "inasumible" que imperen los criterios económicos por encima de los sociales y laborales, "porque no hay necesidad de que cierre esta fábrica tan emblemática en la provincia". Asimismo, remarcó que la planta es rentable y criticó que el único objetivo de la firma sea la deslocalización.Por su parte, el secretario provincial del PA, Manuel Visglerio, afirmó con contundencia que su formación luchará para que no se juegue con el futuro de las "228 familias de Roca".
La diputada nacional del PP por Sevilla, María Eugenia Romero, apostó por el diálogo, aunque admitió que "aún queda mucho por hablar entre los trabajadores y la empresa, si bien, no podemos perder la esperanza". La diputada popular insistió en que hay que evitar el cierre de la factoría para salvar el empleo, "porque nuestra provincia no puede seguir perdiendo tejido productivo ni más empleo".
Tras la manifestación de ayer la plantilla de Roca se prepara para realizar más movilizaciones, aunque ante la nueva situación se planteará si abandona la huelga iniciada hace unos días.
