Sergio García controla un balon.

El Betis fue incapaz de traerse la victoria de Vallecas pese a marcar dos goles en menos de veinte minutos. La endeblez de su línea de zagueros, impropia de un aspirante a subir de categoría, le condenó a volverse sólo con uno de los tres puntos en disputa, un botín insuficiente que le desaloja de la zona de ascenso.

La matinal de Vallecas no deparó grandes sorpresas. Ya sabíamos que el Betis posee una enorme pegada arriba y una defensa nada fiable, certeza que se elevó al cuadrado por la ausencia de los dos centrales titulares –Arzu y Carlos García–, víctimas del desastroso arbitraje de Pino Zamorano la semana anterior y de la nula fuerza que tiene el Betis en los despachos federativos, donde sus recursos suelen tener casi siempre el mismo destino: la papelera.

Antonio Tapia, pese a que apenas confía en Melli, Rivas y Nano para el eje de la zaga –Arzu siempre fue centrocampista y es fijo atrás–, se los llevó a los tres a Vallecas y no echó mano de nadie del filial (donde hay gente muy válida como Alex Ortiz o Miki Roqué...), lo que agradecieron sobremanera los atacantes rayistas, que encontraron inusitadas facilidades para remontar por dos veces un marcador adverso y casi darle la vuelta por completo en la segunda mitad.

Salida fulgurante. El Betis tuvo una salida fulgurante que sorprendió por completo a la también endeble zaga rayista, aunque ése es un problema de Pepe Mel y de doña Teresa. A los tres minutos de juego Damiá fue incapaz de rematar a puerta vacía un buen centro de Nacho desde la izquierda y a los ocho fue el propio Nacho quien obligó a lucirse a Cobeño, tras otras asistencia por la autopista que había en esa banda, esta vez de Sergio García.

El Betis se plantaba con insultante claridad en las narices del portero ex sevillista gracias a las inteligentes maniobras de Emana, Nacho y Sergio García, quien aprovechó un córner en corto para habilitar a Juande y permitir que éste anotara a placer el 0-1 sin oposición alguna.

Los verdiblancos se ponían líderes de Segunda, pero el liderato les duró dos minutos, los que tardó Rubén Castro en cabecear a placer un templado centro de Jofre, al que no tapó bien Nelson. Ni los centrales ni el portero estuvieron afortunados en esa jugada. El golpe, sin embargo, no amilanó a los béticos, que gracias a los arreones de Emana y la calidad de Sergio García seguían llegando con claridad al área rival. Primero avisaron ellos dos, pero fue Rivas (18’) quien acabó haciendo subir el 1-2 al marcador al cabecear a la escuadra un córner que había cabeceado antes Damiá. El Betis era otra vez líder.

Esta vez lo fue durante 18 minutos, los que tardó Piti en anotar el 2-2 tras una concatenación de fallos en el despeje de Rivas y Melli. El Rayo había llegado tres veces y había hecho dos goles: el Betis necesitó seis ocasiones para marcar los suyos, así que... empate y gracias. Gracias porque en la segunda mitad el Betis no existió en ataque –sólo una ocasión en el descuento, tras otro córner–, estuvo a merced de los vallecanos y si no acabó perdiendo fue porque el poste escupió un remate de Castro tras otra pifia monumental de Melli. Con una defensa así, no se pude llegar muy lejos.

2 - Rayo Vallecano: Cobeño; Coke, Pelegrin, Serrano, Albacar; Movilla; Quero, Ángel (Míchel, min. 61), Jofre (Pacheco, min. 79); Rubén Castro y Aganzo (Piti, min. 32).

2 - Betis: Goitia; Damiá (Odonkor, min. 73), Melli, Rivas, Fernando Vega; Nelson, Iriney, Juande (Caffa, min. 63), Nacho; Sergio García y Emaná (Capi, min. 81).

Goles: 0-1, min. 9, Juande; 1-1, min. 11, Rubén Castro; 1-2, min. 19, Damiá; 2-2. min. 37, Piti.

Árbitro: Ontanaya López (colegio castellano leonés). Amonestó a Míchel y Pacheco del Rayo Vallecano, y a Melli, Damiá, Okonkor y Sergio García por parte del Betis.

Incidencias: encuentro correspondiente a la sexta jornada de la Segunda División de Fútbol, disputado en el estadio Teresa Rivero, de Madrid, ante unos 14.500 espectadores, más de 2.000 de ellos béticos.