Jornada seis de la Liga Endesa y el Cajasol sigue sin levantar cabeza, aunque al menos esta vez el equipo de Aíto García Reneses se mantuvo con vida hasta el final. Pero las continuas pérdidas de balón unidas al desacierto en los tiros cuando tenía la oportunidad de dar la vuelta al marcador supusieron una nueva derrota y van cuatro en cinco partidos de liga.
El cinco inicial parecía salir con la lección bien aprendida: presión en defensa y descaro en ataque, pero sólo llegó para ponerse 7-4 y dejarse empatar un 9-9 con los valencianos moviéndose con facilidad por la pintura y colocando el balón sobre la canasta sin despeinarse. Demasiado blando el Cajasol, que no volvió a ponerse por delante en el marcador, y que sólo hizo dos faltas en el primer cuarto, por siete de su rival, para acabar 20-24.
En el segundo cuarto las fuerzas se mantuvieron igualadas, con diferencias que no superaban los seis puntos, siempre a favor de los de Perasovic, en el que destacó el acierto de Faverani. En los locales fue el puertorriqueño Holland quien tuvo más acierto y quien más se atrevió, quizá demasiado, pues sus fallos se repitieron tanto en tiros de tres, uno de tres, como de dos, mientras que la esperada buena mano de Bogdanovic no acabó de aparecer en esta primera mitad que concluyó 38-44.
El equipo seguía con vida, pero le duró poco. El tiempo que Marko Keselj tardó en afinar la puntería y con un triple absolutamente solo situaba al equipo taronja con una ventaja de diez puntos 49-59, para seguir afianzando su ventaja con sendas pérdidas de Sastre y Burjanadze con las que alcanzaron la máxima ventaja en el luminoso justo cuando terminaba el tercer cuarto, 53-68, quince puntos que parecía insalvables.
Y que a la postre lo fueron, y eso a pesar de que Cajasol, tanto por los aciertos propios como por los fallos valencianos, que parecían no querer ganar –o no hacer sangre y endosarle otra paliza a los locales– llegó a situarse a sólo dos puntos a falta de 1.50 para la conclusión (71-73) con un público tan escaso como ruidoso animando a su equipo, pero fue solo un espejismo. Ribas y Martínez acertaban y el Valencia Basket volvía a escaparse 73-79, con presión en defensa, sí, pero con fallos en ataque y el caos final. Con gritos de “Directiva dimisión” y la bronca a Perasovic por pedir tiempo muerto a dos segundos del final, acabó el partido: 73-82.
Ahora toca la Eurocup el miércoles y en la mañana del domingo un nuevo equipo canario al que ganar en casa. Al menos, a ratos, pareció que el cambio de ciclo es posible.
73 - Cajasol (20+18+15+20): Satoransky (16), Holland (24), Bogdanovic (12), Asbury (2), Triguero (-) -cinco inicial-, Tepic (2), Burjanadze (5), Ondrej Balvin (8), Sastre (4) y Radicevic (-).
82 - Valencia Basket (24+20+24+14): San Miguel (9), Rafa Martínez (6), Pietrus (-), Dubljevic (8), Lishchuk (-) -cinco inicial-, Markovic (8), Pau Ribas (12), Doellman (16), Keselj (8) y Faverani (15).
Árbitros: Conde, Sánchez Monserrat y Munar. Eliminaron por cinco faltas personales al local Triguero (m.22).
Incidencias: Partido de la sexta jornada de la Liga Endesa disputado en el Palacio de los Deportes San Pablo ante unos 4.200 espectadores.
