La sección primera de la Audiencia de Alicante condenó a un total de 21 años de prisión al acusado de matar a la joven rusa Svetlana Orlova, que murió por un corte en el cuello en noviembre de 2007 tras salir en un programa de televisión en el que rechazó retomar la relación con su ex novio.
El tribunal consideró que Ricardo Antonio N.R., ex pareja de Svetlana, es autor de un delito de asesinato con alevosía, por el que le condenó a una pena de 19 años de cárcel, y de un delito de maltrato familiar habitual, con el agravante de cometer los actos en presencia de menores, por el que le condenó a dos años de prisión.
Asimismo, la sala condenó al procesado a indemnizar al hijo de Svetlana con 300.000 euros, a la madre de la víctima con 30.000 y al pago de las costas del juicio, incluidas las de la acusación particular. La Audiencia consideró probado que el condenado mantuvo una relación sentimental con Svetlana Orlova desde 2004 hasta octubre de 2007, momento en que se rompió la relación con oposición del procesado.
La sala estimó que Ricardo Antonio N.R. "sometió a Svetlana a una serie de maltratos físicos y psíquicos" que se manifestaron en una denuncia que Svetlana presentó porque el procesado la había dejado encerrada, denuncia que la víctima retiró más tarde. Además, había otra denuncia que motivó una sentencia condenatoria contra el acusado por maltrato físico.
Para el tribunal, este maltrato quedó acreditado por la huida del domicilio conyugal que Svetlana y su hijo tuvieron que emprender en dos ocasiones "para protegerse de las maneras agresivas del acusado, yendo a casa de una amiga, con signos evidentes de haber sido agredida".
El tribunal consideró probado que el día que ocurrieron los hechos, a las 18.30 horas, el procesado acudió al edificio donde vivía Svetlana para averiguar qué vivienda ocupaba ésta. Así, Ricardo Antonio N.R. llamó a varios pisos desde el interfono de la calle preguntando donde vivía una rusa. Una vez que el acusado coincidió con la víctima la introdujo en el ascensor, donde mantuvieron una discusión, y en el transcurso de la disputa el procesado "enarboló un cuchillo, del que trató de librarse la víctima sujetándolo y poniendo las manos a modo de escudo protector". Sin embargo, Ricardo Antonio N.R. dio un tajo con el cuchillo en el cuello de Svetlana con el que le seccionó "la carótida interna derecha y la yugular interna", y esta herida le causó la muerte.
Para el tribunal, la explicación del acusado de que no estuvo en el lugar de los hechos "no es creíble" porque su madre no corroboró su declaración, ya que no estaba propuesta como testigo, y su padre se acogió al derecho de no declarar, por lo que tampoco corroboró la versión de su hijo.
El tribunal estimó en el delito de asesinato el agravante de alevosía, puesto que el procesado utilizó un cuchillo que le "dotaba de una superioridad manifiesta y que aseguraba la comisión del hecho sin riesgo para él".
Asimismo, la sala tuvo "la convicción" de que sucedieron episodios de "acoso" a la víctima, y consideró que los testimonios "describen una situación de menosprecio continuado del acusado respecto a la difunta, por el trato degradante a que la sometía por su carácter violento y modales amenazantes".
Nueva medida. Los huérfanos de víctimas de violencia de género menores de 21 años de edad podrán cobrar la pensión de viudedad que generó su madre, además de la de horfandad que ya les corresponde, según el Real Decreto de modificación de la Ley de Seguridad Social aprobado ayer en Consejo de Ministros.
La vicepresidenta Primera del Gobierno, María Teresa Fernández de la Vega, explicó en rueda de prensa que esta iniciativa forma parte de un paquete de medidas para "seguir avanzando en el camino de la igualdad".
