La asociación de vecinos de Condequinto intenta implicarse en el proyecto de construcción de su centro social, cuyo boceto ya fue entregado por los técnicos municipales y que ahora ellos están estudiando para poder participar activamente en el proyecto.
En Dos Hermanas existe un tópico muy común con respecto a los habitantes del sector de Montequinto, a los que a menudo se les echa en cara que viven en el término municipal pero no participan de la vida de la ciudad. No es éste el ejemplo que da la asociación de vecinos de Condequinto, que actualmente trabaja junto con el equipo de gobierno (PSOE) en la construcción de su centro social. Los técnicos del departamento de Urbanismo realizaron el pertinente informe de construcción del complejo y los vecinos llevan todo el verano discutiendo cómo se podrá mejorar ese inmueble, que al fin y al cabo van a utilizar ellos.
El presidente del citado colectivo, Miguel Ángel González, destacó que "el proyecto de momento está bien", aunque quieren reunirse para ver si les gusta a todos "y también si existe alguna propuesta en la que se pueda mejorar el centro social".
El líder de los vecinos no quiso entrar en detalles hasta que la obra esté licitada y las propuestas entregadas al Ayuntamiento de Dos Hermanas, porque luego "la gente se lía". No obstante, sí manifestó que "Condequinto es una barriada nueva que cada vez está más integrada, y ya es hora de que tenga su centro social, como lo tienen otras".
El recinto servirá para el ocio, la cultura y la convivencia de un barrio con más de 5.000 habitantes. Su líder sugirió que el modelo en el que deben basarse es el de La Motilla, con pistas para hacer deporte y salones de actos, pero sin piscina. "Ésta es una urbanización en la que muchos tienen vivienda con piscina, así que no es necesario hacer una para todos", justificó al respecto.
En realidad, éste es un proyecto que debía haberse licitado antes de septiembre. Sin embargo, los vecinos ya fueron informados de que en la concejalía de Urbanismo, debido a la gran cantidad de empresas que presentaron ofertas para la construcción de las 5.109 viviendas de protección oficial (VPO) que van a levantarse desde final de año, este proyecto había quedado un poco en segundo plano, una decisión que desde el colectivo encontraron lógica. De hecho, los vecinos están muy satisfechos con las negociaciones con el Ayuntamiento de Dos Hermanas para poner un marcha un proyecto largamente ansiado por ellos.
