Isabel Laguna (EFE)
Un coro formado por ancianos de hasta 93 años que deciden acabar sus días cantando canciones de James Brown, The Clash, Sonic Youth o Coldplay centra 'Corazones rebeldes', una conmovedora película que llega a España después de haberse convertido en el segundo documental más visto en el mundo en 2008.
Corazones rebeldes, que se estrena en España el próximo 5 de diciembre, es el primer largometraje del británico Stephen Walker, director de más de veinte películas de televisión que, tras ver una actuación en Londres de este peculiar coro llamado Young at heart (Jóvenes de corazón) formado por ancianos de entre 75 y 93 años residentes en Northamptin, un pueblecito de Massachusetts, decidió contar su historia para la gran pantalla.
"Son una inspiración, están al final de sus vidas y han decidido vivir cada segundo, hasta el final, cantando. Pensamos en la vejez como algo horrible, cuando sólo el hecho de llegar vivos a esa edad es un éxito", ha dicho hoy en Madrid Stephen Walker, quien no olvida la nueva dimensión que cobró la canción Should I stay or should I go ('Debo quedarme o debo irme'), el éxito de The Clash, en la voz de Eileen Hall, una nonagenaria componente de Young at heart.
En marzo de 2006 Stephen Walker se marchó a Northamptin para rodar su documental mientras el coro preparaba un nuevo espectáculo. Ninguno de los miembros que iniciaron el coro vive ahora -Bob Cilman ha estado en 79 funerales de sus cantantes-, pero su espíritu sobrevive en una formación que ha cambiado su repertorio por temas célebres del rock o, incluso, del punk y que ha encontrado un éxito que les ha llevado a actuar por todo Estados Unidos e incluso a hacer giras por Europa.
