La Policía Nacional ha detenido a cuatro jóvenes, de entre 20 y 27 años, acusados de un delito de daños por realizar pintadas en pro de la independencia andaluza en los muros de las cocheras de Tussam, según confirmaron fuentes policiales. La organización nacionalista andaluza Jaleo! ha criticado la "desproporción" de la actuación policial.
Las pintadas se realizaron en las paredes exteriores de Tussam, en el marco de la reciente huelga del sector del transporte y en apoyo a las reivindicaciones de los trabajadores, pero las detenciones tuvieron lugar el lunes y el martes de esta semana, una vez que los chavales fueron identificados. El primero fue arrestado en su domicilio de Bormujos por agentes de paisano, y los otros tres se presentaron en la Jefatura de Blas Infante al recibir citaciones de la Brigada de Información de la Policía Nacional para que fueran a declarar. Todos fueron puestos en libertad sin ser trasladados siquiera al juzgado, dada la escasa trascendencia del delito.
La organización nacionalista andaluza Jaleo!, a la que pertenecen los arrestados, denunció la "desproporción" de la actuación policial, ya que consideró "innecesario" que por unas pintadas uno de los jóvenes fuese detenido en su domicilio y trasladado, esposado, a la Jefatura de Policía, donde pasó varias horas. En un comunicado publicado en su web, censura que se entregaran las citaciones a sus familiares e incluso en un caso a un vecino.
Los cuatro detenidos son simpatizantes de Jaleo!, que se define como "una organización juvenil andaluza revolucionaria, creada en 1996, que propugna la liberación del pueblo andaluz" y que se inscribe en la izquierda nacionalista. La entidad ha criticado las detenciones porque "por hacer tres pintadas no es normal que la Policía vaya a tu casa a detenerte, cuando otras veces simplemente se ha enviado una citación", según un portavoz, que aseguró que ninguno de los implicados tiene antecedentes.
contrarios a la violencia. La entidad lamentó que se intentara relacionar esto con otras pintadas amenazantes en la sede del PP, o con una charla en la que participó un abogado vasco imputado en el proceso contra el entorno de ETA, que se celebró en el Rectorado el mes pasado, "con las que no hay relación alguna". "Es verdad que hacemos pintadas un par de veces al año, pero no tenemos nada que ver con actitudes violentas".
Las pintadas, en todo caso, sí fueron en esta ocasión de mayor tamaño que otras veces, según indicaron fuentes de Tussam, que indicaron que se les dio el tratamiento habitual: se volvieron a pintar los muros.
