Culpable de asesinato al acusado de matar a su hermano en La Rinconada

Así ha declarado un jurado popular al hombre acusado de matar de tres disparos a su hermano el 16 junio de 2013.

El jurado popular ha emitido este martes su veredicto respecto al acusado de matar en 2013 a su hermano en La Rinconada (Sevilla) de tres disparos en la cabeza, y ha considerado de forma unánime que fue el autor del asesinato. Tras un día de deliberación, el jurado ha concluido de forma unánime que el acusado, Francisco G.C., de 47 años, fue el que mató a su hermano Manuel en una nave propiedad de su madre con una pistola del calibre 6.35 para la que no tenía licencia. En su veredicto, el jurado se ha mostrado también de forma unánime desfavorable a la suspensión de la pena y a que le sea concedido el indulto, aspectos sobre los que se pueden pronunciar. El jurado ha considerado probado que el acusado disparó tres veces sobre su hermano en una nave propiedad de su madre, uno de los disparos hechos "a cañón tocante" sobre a sien de la víctima, y han resaltado que se localizaron restos de pólvora en prendas y en el coche del atacante. También han coincidido en considerar "casi nulas" las relaciones entre ambos hermanos por los "graves problemas económicos" que existían. Durante lectura del veredicto, familiares de la víctima y del acusado no han podido contener su emoción y han llorado antes de mostrar su satisfacción por considerarlo culpable. Tras la lectura del veredicto, las partes han ratificado sus peticiones de condena, que en el caso de la Fiscalía era de 22 años de cárcel por los delitos de asesinato y tenencia ilícita de armas, mientras que la acusación particular, que ejerce María José González en representación de la viuda y tres hijos del fallecido, elevó la petición a 23 años. La Fiscalía ha añadido la petición de que el acusado, por su "peligrosidad", no pueda acercarse ni residir en La Rinconada por un periodo de diez años. La defensa del agricultor, Nicomedes Rodríguez, ha solicitado la menor pena posible y se ha reservado su derecho a recurrir la sentencia.

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