Curro Durán llega al Hotel Hesperia de Sevilla con casi una hora de retraso. Tras haber estado durante sesenta minutos bordeando las inmediaciones del hotel sin dar con la entrada -los hombres también carecen de sentido de la orientación-, aparece cargado con bolsas de su firma, pidiendo disculpas y acompañado por su madre y una modelo con la que nos muestra uno de sus trajes.
Durán nació en Antequera hace 23 años. Creció en una familia dedicada al mundo de la moda flamenca, entre volantes, patrones y trajes de gitana: "He visto este mundillo desde pequeño", dice. Con 19 años inicia sus estudios de Diseño y Moda en Sevilla y con 21 se proclama vencedor del Certamen de Diseñadores Noveles del Salón_Internacional de Moda Flamenca (Simof). Tres años después tiene en su haber tres colecciones presentadas en este mismo salón y la presencia en editoriales de moda de la revista Hola! junto a diseñadores de la talla de la cordobesa Juana Martín o los sevillanos Victorio & Lucchino. La productora Green Moon, propiedad del actor Antonio Banderas, también ha requerido alguno de sus diseños para la realización de un documental sobre el flamenco que ha sido encargado por el Instituto Cervantes de Nueva York.
Consciente de las dificultades que entraña hacerse un hueco en el mundo de la moda flamenca-"Sevilla es una plaza muy difícil"- son esas "ganas de comerte el mundo y esa vitalidad que los veinte años te dan" las que le ayudan a seguir planteándose nuevas metas cada día. No corre pero tampoco se para. "Quiero irme fuera de España, quiero probar también con el prêt-à-porter y ver si quiero seguir haciendo esto".
Preguntado por la introducción de nuevas formas en la moda flamenca, se muestra sincero: "Tenemos tantas ganas de innovar que a veces perdemos la esencia de lo que es un traje de flamenca", a la vez que sentencia: "O nos pasamos de modernos o nos pasamos de antiguos. Tenemos que buscar el equilibrio entre las dos cosas".
Dice que "jamás le quitaría volantes a un traje de flamenca", que éste debe ser muy femenino: "El traje tiene que insinuar, pero no enseñar", y ve "inútil" intentar que la moda flamenca traspase Despeñaperros: "Sí estoy de acuerdo con que se conozca fue de Andalucía pero el traje tiene sus connotaciones y no lo puedes sacar de ahí: o es para una feria o es para una romería".
Las flamencas de los años 70 y 80, la obra cinematográfica de Carlos Saura, la alta costura de París pero sobre todo el flamenco han sido los mecanismos utilizados por Curro Durán para mostrar su arte: "Al igual que los músicos y los pintores, yo también expreso mis sentimientos e inquietudes en cada una de mis colecciones".
El año que viene, el diseñador antequerano tiene previsto inspirar su colección en la Exposición del 29. Después, cuando se apaguen las luces de la pasarela, Durán barajará otra decisión: la de irse fuera de España, probar nuevas formas y ver si, pasado un tiempo, se cumple eso de que "en casa del herrero, cuchara de palo".
