Local

De ganga a estafa en un solo ‘click’

Una banda inglesa mina la red de anuncios falsos de pisos en Andalucía. Sólo en Sevilla se han presentado en la última semana cuatro denuncias de ciudadanos víctimas de estafas, que se extienden por toda la comunidad.

el 20 dic 2009 / 19:56 h.

TAGS:

El Grupo de Delitos Tecnológicos de la Policía vigila las web para encontrar fraudes.

Un piso con dos dormitorios en pleno centro, por 350 euros al mes. El propietario, un ingeniero extranjero que se ha trasladado repentinamente a Liverpool por trabajo y al que le urge encontrar un inquilino. La entrega de llaves debe hacerse a través de una empresa de mensajería previo pago, eso sí, de dos mensualidades y por medio de un envío con Western Union o servicios similares. ¿Una ganga? No, la estafa de una banda que opera desde Reino Unido a través de internet y que ahora se ha fijado en Andalucía.


Sólo en Sevilla se han presentado en la última semana cuatro denuncias de ciudadanos que han sido víctimas de la versión digital del timo de la estampita, pero hasta el Grupo de Delitos Tecnológicos de la Jefatura Superior de la Policía de Andalucía Occidental han llegado casos similares desde todos los rincones de la comunidad. Hace unos meses, la organización de consumidores Facua alertó también de la proliferación de estas estafas, conocidas ya en países como Francia e Inglaterra y que en el último año han llegado también a Valencia o Madrid. Además, desde principios de año, la empresa de mensajería TNT -que no realiza envíos de dinero- tiene colgada en su web una nota alertando de que están usando su nombre para estos timos.


Los estafadores cuelgan sus anuncios en las páginas de alquiler más visitadas y ofrecen todo tipo de detalles del piso -que o bien no está en alquiler o se aprovechan del anuncio puesto por el propietario real-, desde la dirección exacta hasta fotografías del interior. El procedimiento siempre es el mismo y el contacto con el supuesto propietario es sólo a través de correo electrónico y en inglés aunque a veces, y como un supuesto esfuerzo para entenderse con el futuro inquilino, escriben en castellano.


Si la víctima decide seguir adelante, el estafador (que se esconde tras identidades como la de Peter Martin, John Smith u otros nombres ingleses) le comunica que ya ha entregado las llaves a una empresa de envíos que, apenas unas horas después, remite un correo electrónico a la víctima confirmándole la entrega e indicándole el nombre del agente de Western Union al que tiene que enviar el dinero antes de hacer el intercambio. Por supuesto, tanto el correo de la empresa como el nombre del agente son falsos y en cuanto la víctima entrega el dinero no vuelve a tener noticias ni de él ni de las llaves del piso.
A partir de entonces, lo único que les queda a los estafados es presentar una denuncia aunque, como explica el jefe de Grupo de Delitos Tecnológicos de Andalucía Occidental, que el dinero salga al extranjero "dificulta mucho" la labor policial. A esto, explica, se suma que "los autores no están en España" y que la persona que recoge el envío por Western Union "no tiene que acreditar su identidad", por lo que es más difícil seguirles la pista.


Se desconoce, por el momento, si los estafadores forman parte de una o varias organizaciones pero a la Policía sí que le consta que con el tiempo han ido perfeccionando y diversificando su modo de operar. Así, cuenta el jefe del Grupo de Delitos Tecnológicos, han "ampliado su oferta" y lo mismo alquilan un piso que venden un coche o una mascota. Para ello, no dudan en colgar páginas web -donde la víctima, supuestamente, puede hacer un seguimiento del estado de su pedido-, falsifican logotipos y hasta crean empresas ficticias.


La estafa del piso fantasma es "la más reciente" pero no es la única. De hecho, sólo en el último mes, los agentes de delitos tecnológicos han investigado en Sevilla más de 30 casos de fraude a través de internet. Estiman, en cambio, que puedan ser muchos más ya que la mayoría de las víctimas no suelen denunciar. Entre los casos más sorprendentes está el de una sevillana que envió más de 1.000 euros a Camerún a cambio de un yorksire que, por supuesto, nunca llegó a sus manos. "Comenzaron pidiéndole 180 euros, importe al que fueron sumándole otros para seguros médicos, licencias...". También son frecuentes las estafas en la venta de coches por internet. En uno de los casos un hombre pagó "5.000 mil euros por un BMW que, argumentaba el estafador, se encontraba en Inglaterra y del que quería deshacerse por tener el volante a la izquierda".


La llegada de internet a los hogares andaluces es relativamente reciente y eso juega a favor de los amigos de lo ajeno. Por eso, aseguran desde el Grupo de Delitos Tecnológicos, hay que evitar "dar credibilidad" a todo lo que se encuentre en internet e intentar no desviarse de los métodos seguros de pago con los que cuenta la propia red.

Paradójicamente, una fórmula fiable de averiguar si se está ante una ganga o una estafa es recurrir a la propia red, ya que está plagada de foros y páginas en las que las víctimas de distintos fraudes alertan a los usuarios y dan pistas sobre cómo detectarlos rápidamente.
Tampoco hay que fiarse de correos que, aparentemente proceden de empresas conocidas y, ante la duda, mejor ponerse en contacto con ella. Desde el Departamento de Comunicación de TNT España -que ya ha puesto el caso en manos de la Policía- explican que en los emails fraudulentos "añaden una serie de denominaciones como services" que no se corresponden con las que utiliza habitualmente la firma. Desde Facua recomiendan no pagar nada por adelantado y, en todo caso, optar siempre por transferencias bancarias y otros sistemas más seguros.

  • 1