Economía

De la euforia a la resignación

El temor a una nueva recesión mundial anula el auxilio del BCE en las bolsas, aunque la prima de riesgo en España se desploma.

el 08 ago 2011 / 17:17 h.

Un operador sigue el curso de la jornada en la bolsa de Fráncfort hoy lunes.

Los mercados amanecieron ayer eufóricos. Los índices búrsátiles se disparaban y las primas de riesgo para la deuda pública de España e Italia, los dos países donde los especuladores centran ahora sus ataques, se desplomaban. Surtían efectos la decisión del Banco Central Europeo (BCE) de intervenir y comprar bonos de ambos países y el apoyo expreso de Alemania y Francia. Pero conforme avanzaba la mañana, las bolsas se adentraban en las pérdidas ante las dudas sobre cuánto duraría el plan de adquisiciones del BCE y, sobre todo, las dudas sobre la recuperación económica tras un informe de la OCDE que habla del riesgo de otra recesión a nivel internacional y, además, las nuevas advertencias sobre la salud de la economía de EEUU. Y al final, un lunes negro que saca a la luz una pregunta. ¿Cuánto durarán los beneficiosos efectos que ha tenido la decisión del instituto emisor de la Eurozona?

Así, la bolsa española cerró la sesión con un recorte del 2,44%, que colocó al selectivo Íbex 35 en el nivel de los 8.459,4 puntos, la cota más baja desde el 8 de abril de 2009, arrastrado por el retroceso de Wall Street tras abrirse la sesión.

Sólo dos valores terminaron en positivo: Banco Popular (+0,15%) y BME (+0,03%). Las mayores bajadas fueron para Arcelor Mittal (-9,67%), Gamesa (-6,92%) y la entidad CaixaBank (-6,02%). Telefónica se dejó un 2,51%, Repsol, el 2,1%, Bankinter, el 1,9%, BBVA, el 1,77%, y el Banco Santander, el 1,15%. El Sabadell escapó a los recortes y terminó plano.

La rebaja de la calificación de la deuda norteamericana aplicada por Standard and Poor's (S&P) lastró a Wall Street y empañó el anuncio del BCE de continuar con el programa de compra deuda, en este caso de Italia y España.

No obstante, tal decisión de la autoridad monetaria sí tuvo impacto en el mercado de deuda y, así, consiguió un descalabro de la prima de riesgo española superior a los 100 puntos básicos, hasta situarse en 290.

El Íbex acogió con fuertes subidas iniciales, de hasta el 4%, ese auxilio del instituto emisor, hasta cotizar en algunos momentos por encima de los 9.000 puntos. Sin embargo, tras dos horas de cotización comenzó a desinflarse por la apatía del resto de indicadores europeos. La apertura bajista de Wall Street terminó de lastrar al selectivo español, que se anotó un pronunciado descenso.

La analista Soledad Pellón, de IG Markets, explicó que la caída del Dow Jones de Wall Street, que al cierre de las bolsas europeas se dejaba en torno al 2,5%, se debe a la falta de confianza en la economía norteamericana, que aún tiene que hacer frente a severos ajustes.

Pellón recordó que la bolsa estadounidense ejecutó lo que se conoce como la regla 48, por la que los creadores de mercado no pueden dar precios en la preapertura, sólo en la apertura. Tal medida se lleva tan sólo a cabo en situaciones de volatilidad extrema, por lo que genera desconfianza en los inversores y aporta una visión negativa de la situación, según indicó esta experta.

Pero había aún más leña para el fuego de la jornada de ayer. Así, S&P advirtió de que EEUU tiene "una probabilidad entre tres" de sufrir una nueva rebaja de rating entre los próximos seis a veinticuatro meses y recordó que sólo cinco estados han logrado hasta ahora recuperar la nota AAA tras haberla perdido, para lo que necesitaron entre nueve y dieciocho años. El detalle era como para infundir optimismo.

Nuria Álvarez, de Renta 4, aseguró que los mercados no estaban teniendo presente que el BCE está comprando deuda de países periféricos. De hecho, todos los indicadores europeos cerraron la sesión con severos descensos, de más envergadura incluso que los de Madrid y Milán, ambos con un 2,4%. Fráncfort se dejó el 5,02%. Y tras esta plaza alemana, las de París (-4,68%), Londres (-3,39%) y Lisboa (-3,13%). Al otro lado del Atlántico, el Dow Jones perdió un 5,52% y el Nasdaq, un 6,11%

En opinión de Nuria Álvarez, los mercados están denunciando con los fuertes recortes que comprar deuda pública de países con problemas sólo sirve para ganar tiempo y permitir así que los diferenciales de la deuda no sigan marcando máximos, pero a la vez están demandando más agilidad en la implantación de las medidas aprobadas en julio con el segundo rescate a Grecia.

Mientras, la agencia de calificación crediticia Moody's confíó en que las autoridades de EEUU ejecuten nuevas medidas de ajuste del déficit que permitan al país conservar su máxima nota de solvencia Aaa (la máxima), después de que la firma confirmara el rating estadounidense la pasada semana, aunque cambiará a negativa su perspectiva (tendencia de futuro).

Por su parte, la tercera gran calificadora de riesgos, Fitch, señaló que aún mantiene abierto el proceso de revisión de la nota de Estados Unidos, que goza ahora de la máxima calificación, AAA, y recordó que esta revisión concluye "a finales de agosto".

Ya en el mercado de divisas, el euro cedió ayer posiciones frente al dólar y al cierre de la sesión el cambio oficial entre las dos monedas quedaba fijado en 1,42 unidades.

 

La OCDE advierte de un frenazo económico mundial

La Organización para la Cooperación y el Desarrollo Económico (OCDE) advirtió ayer de una “desaceleración” de la actividad en las principales economías del mundo. El indicador elaborado para junio, comparado con la evaluación realizada para el mes anterior, apunta que surgieron “fuertes señales” de un punto de inflexión en los crecimientos de países como Estados Unidos, Japón y Rusia. El indicador, diseñado para anticipar alteraciones en la tendencia económica, también señala una desaceleración en Canadá, Francia, Alemania, Italia y el Reino Unido. En esta misma línea, la OCDE constata una ralentización en otras de las economías más fuertes del mundo y en países emergentes como Brasil, China y la India. En el caso de España, el índice también descendió en julio y se mantuvo por debajo del promedio de la OCDE  –que, asimismo, sufrió un recorte respecto al mes anterior, y de la Eurozona–. Estos datos publicados ayer por el club de los países más industrializados del mundo anticipan que el crecimiento económico mundial será exiguo en los próximos meses, aunque no permiten determinar si el frenazo llevará finalmente a un segundo episodio de recesión internacional.

La CEOE critica el adelanto del Impuesto de Sociedades

La patronal CEOE replicó ayer a la vicepresidenta económica del Gobierno, Elena Salgado, que anticipar el pago del Impuesto sobre Sociedades “restaría capacidad financiera a las empresas, dificultando aún más sus esfuerzos por superar los efectos de la crisis” en un momento en el que “uno de los más graves problemas que sufren es la falta de financiación”. A estas críticas se sumó el coordinador de Economía del PP, Cristóbal Montoro, quien acusó a Elena Salgado de “falsear” el calendario para cumplir con el objetivo de déficit público del 6% del PIB para este año con los cambios que prevé introducir en el Impuesto de Sociedades para adelantar el pago de las grandes compañías.

  • 1