Notificaciones y repartos la Vega comenzó su actividad hace siete años cuando cinco rinconeros decidieron establecerse como autónomos y montar su propio negocio. La empresa se ha convertido en todo un referente en su ámbito de trabajo.
En el año 2001 decidieron poner en marcha el negocio con el objetivo de "realizar una labor social, generar empleo en la localidad y dar oportunidad a las personas que no lo tienen fácil para encontrar trabajo", como comentan sus fundadores.
La idea de implantar su empresa y establecerse como autónomos les llegó en un momento clave de sus vidas. Eran mayores de 40 años y tenían algún tipo de discapacidad física que les había condicionado para abandonar su hasta entonces trabajo. Desempleados, entraron a formar parte de la asociación PM 40, donde detectaron que el municipio carecía de una empresa de notificaciones y repartos.
Así, hace siete años Manuel Castillo, Guillermo Luque, José Antonio Fernández y José Baca decidieron ser socios y constituir esta empresa, a la que se unió Enrique Fernández, el más joven, como gerente de la cooperativa. De sus comienzos y avances Enrique recuerda que "cuando empezamos repartíamos en bicicleta, ahora afortunadamente el negocio va muy bien y tenemos dos motos y dos furgonetas que nos permiten realizar trabajos fuera del municipio".
Más empleo . La plantilla también ha crecido. Actualmente la conforman 14 empleados, de los cuáles el 70% son personas con discapacidad como requiere la condición de ser un Centro Especial de Empleo.
En la sede de la empresa ubicada en la Plaza Alonso Cano, 19, comienza cada mañana el trabajo con la clasificación de las cartas, notificaciones y periódicos, como El Correo de Andalucía y la publicación local Toma Nota, para su posterior entrega.
Una cooperativa que se ha consolidado en el tejido empresarial del municipio bajo dos pilares básicos: cumplir una labor social, dando oportunidades de trabajo a los más desfavorecidos, y generar empleo.
