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Del Nido: "Jamás nos olvidaremos de Antonio"

"Procuraremos que todos los chicos aprendan de él", dijo Del Nido

el 27 abr 2010 / 20:37 h.

Del Nido pronunció unas palabras en la inaguración del monumento a Puerta.

José María del Nido, presidente del Sevilla, fue uno de los encargados de emitir su discurso sobre la figura de Antonio Puerta en el día de su homenaje y como es habitual respondió a las expectativas. Su alocución, cargada de sentimiento y emoción, comenzó con una referencia a Gregorio Marañón.

“Dijo Gregorio Marañón, ese gran especialista en medicina que se dedicó a salvar vidas durante tanto tiempo, que nadie más muere que el que es olvidado. Nunca pudo decir mejores palabras para un acto como éste. Y yo iría más lejos, nadie muere mientras sea recordado y nosotros día a día hemos querido inmortalizar la figura de Antonio. Este día, cuatro años después de que nos enseñara el camino de la gloria europea, descubrimos una estatua que representa su figura y que hará que ésta perdure en el tiempo, justamente donde él se crío como futbolista”, señaló el dirigente nervionense.

Del Nido explicó que con este acto y la estatua conmemorativa el Sevilla pretende “que nadie olvide a Antonio Puerta, que murió sudando la camiseta del Sevilla”: “Era uno de los nuestros y se crió en esta ciudad deportiva y triunfó en el primer equipo. Jamás nos olvidaremos de Antonio y además procuraremos que todos estos chicos que están hoy aquí aprendan y recuerden siempre su figura”.

Más concretamente, el dirigente nervionense quiso resaltar el duro trabajo llevado a cabo por Constantino Gañán, autor de la escultura de Puerta que presidirá la ciudad deportiva del Sevilla, y agradeció a los miembros del jurado que trabajaron en el proyecto: “La estatua es una verdadera obra de arte. Espero que perdure por los tiempos para todo aquel que visite la ciudad deportiva en la eternidad”.

Para acabar su discurso, el mandamás nervionense miró al cielo. “Va por ti, Antonio. Viva el Sevilla”, exclamó, al tiempo que el numeroso público asistente rompió en una ovación y en aplausos.

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