La plantilla, en el Ayuntamiento de Sevilla.
El presidente del Sevilla, José María del Nido, ha ejercido de anfitrión hoy en la ceremonia oficial celebrada en el elegante Salón Colón del Ayuntamiento tras la conquista de la Copa de Campeones Juvenil. El dirigente, acompañado por el cuerpo técnico y la plantilla del División de Honor Juvenil de Agustín López, se ha congratulado de abrir por octava vez esta magna casa.
La última vez que vinimos fue hace menos de tres años, cuando ganamos en 2010 la Copa del Rey al Atlético de Madrid. Y entre aquel título y este hay muchas similitudes. Lo hemos conseguido con el sello de la cantera, se felicitó. Y es que, según su relato, en aquella final de Copa participó un canterano como Antonio Luna y los goles fueron conseguidos por otros dos canteranos, Jesús Navas y Diego Capel.
La cantera del Sevilla sigue trayendo gloria a esta ciudad. Es motivo de orgullo, señaló. En su alocución recordó la figura del malogrado Mariano Pulido, técnico del grueso de la plantilla que se ha proclamado campeona. Habéis tenido la suerte de haber trabajado con él. Está orgulloso de vosotros y seguro que está aplaudiendo desde el cielo, manifestó.
Y antes de apelar a un símil con el Macaranazo de 1950 -llamó Balaidazo al título juvenil-, el dirigente expuso que la competición no acaba aquí. Hay un segundo título -la Copa del Rey-. La final es el 30 de junio en Almería y habrá que lucharlo, recordó.
