El decepcionante partido que ofreció el Cajasol en Riga a renglón seguido del excelente encuentro en Madrid ante el Real preña de incertidumbre la puesta en escena de hoy en Bilbao. Manel Comas comprendió en Letonia que tiene entre manos un equipo con tendencia al despiste y desde la noche del miércoles les volvió a apretar las clavijas. ¿Habrá servido?
Es razonable pensar que este mediodía encontrará más dificultades en La Casilla que en el Riga Arena, donde la alarmante falta de intensidad colocó un lastre de 14 puntos para la continuidad en la Eurocopa. El nuevo toque de atención del entrenador y de los responsables de la entidad debe servir de acicate para recuperar el nivel competitivo que ofreció en Vistalegre y en buena parte del partido ante el Bruesa, equipo que, precisamente, se convirtió en víctima propiciatoria del iurbentia Bilbao Basket, octavo con tres victorias, en la última jornada en el mismo escenario de hoy.
No es una pista sencilla para asaltar, ya no lo fue la temporada pasada y en ésta sólo el poderoso Unicaja ha ganado, después de pasar también por La Casilla ViveMenorca y el mencionado Bruesa. El histórico tampoco es favorable a los intereses sevillanos, puesto que cuando cumple con la quinta visita, sólo en la primera venció el entonces Caja San Fernando, el 31 de octubre de 2004, con 27 puntos y 10 rebotes de Lou Roe y 24 de Donatas Slanina, recién fichado, ayer mismo, por el CB Murcia.
No tiene este Cajasol jugadores tan determinantes como esos dos estiletes del entonces conjunto dirigido por Velimir Perasovic, pero sí una batería de buenos jugadores capaces de competir a un alto nivel asumiendo de forma repartida las responsabilidades. La defensa vizcaína les pondrá en problemas. Figura como la cuarta que menos encaja, superando por poco los 70 puntos, con el agravante de que, salvo en Madrid, el equipo sevillano ha tenido su principal talón de Aquiles en el abordaje del aro rival.
Así, el fundamento del partido debe cocinarse en la defensa sevillana, concepto que incluye la faceta reboteadora. En ese área disciplinaria Manel Comas tiene su principal caballo de batalla, porque es el apartado que más concentración, ajuste táctico, solidaridad y esfuerzo exige. No por manido deja de ser menos cierto que los éxitos de un equipo de baloncesto se encuentran en el mayor porcentaje en la defensa. Otro inconveniente importante del partido para el Cajasol aparece en el puesto de base, cuando el club sigue peinando el mercando en busca de un sustituto para Elmer Bennett. La conclusión de Riga fue precisamente que más pronto que tarde debería llegar. Andrea Pecile y Pedro Rivero tendrán hoy un compromiso duro ante un opuesto como Javi Salgado, un director de orquesta notable que encabeza la lista de asistencias (4.83), es octavo en recuperaciones y décimo anotador nacional (10). La victoria, por tanto, se compra cara, y de ella depende que el objetivo de la Copa deje de ser accesible.