La mató en su domicilio por un móvil que aún la Policía trata de desentrañar y para hacer desaparecer su cadáver urdió un macabro plan, digno de la mente de los peores asesinos: decidió decapitar y descuartizar su cuerpo arrojando sus restos a las aguas del Guadalquivir en una maleta y en una bolsa. El autor de tan tétrica maquinación es un vecino del Tiro de Línea, identificado como A.G.S., de 30 años de edad, quien ha sido detenido por la Policía Nacional como supuesto autor de la muerte de una mujer de 49 años, natural de EEUU y cuyo cadáver ha sido hallado en el río Gualdalquivir, informaron fuentes policiales.
La desaparición de esta mujer norteamericana había sido denunciada en dependencias policiales el pasado sábado. Una vez formulada dicha denuncia, se activó el protocolo establecido en casos de desaparición, iniciándose las gestiones oportunas por parte del grupo de Homicidios de la Brigada Provincial de Policía Judicial.
Las investigaciones policiales, realizadas en su círculo de amistades y conocidos, establecieron la posibilidad de que uno de los conocidos de la víctima pudiera estar implicado en el hecho, por lo que la investigación se centró en quien se identificó como A.G.S., de 30 años de edad y amigo de la víctima.
Así, este individuo ha sido detenido este pasado lunes por la Policía Nacional, efectuándose, con la autorización judicial un registro en su domicilio, donde se realizaron diferentes pruebas por parte de la Brigada Provincial de Policía Científica que aportaron indicios "suficientes" de su participación en la muerte de la mujer. En la noche del lunes, los agentes del Grupo Operativo Especial de Seguridad (GOES) del Cuerpo Nacional de Policía rastrearon una zona del río Guadalquivir ante la posibilidad de que su cadáver hubiera sido arrojado al mismo, espacio donde efectivamente fue encontrado parte del cuerpo introducido en una maleta en una zona cercana al puente de las Delicias, según detallaron fuentes policiales.
Durante la tarde de ayer, con la colaboración del Grupo Especial de Operaciones (GEO), siguieron rastreando zonas próximas al río Guadalquivir, donde fueron hallados la cabeza y un brazo de la víctima metidos en una bolsa, así como efectos personales de esta mujer.
Según fuentes policiales consultadas por este periódico, la víctima y su asesino eran "vecinos del mismo barrio", aunque la investigación aún no ha establecido el grado de relación que mantenían ambos.
La Policía continúa en estos momentos con las gestiones a fin de esclarecer totalmente lo ocurrido, mientras que en un principio tiene previsto agotar las 72 horas permitidas por la Ley para poner a este sujeto a disposición judicial.
La desaparición de la mujer norteamericana había despertado las sospechas de su círculo de amigos y conocidos, de ahí que "alguien de su entorno más cercano" decidiera denunciar el pasado día 4 su ausencia. La víctima, de nacionalidad norteamericana, era vecina del Tiro de Línea y poseía un permiso de residencia en España, detallaron fuentes policiales.
La detención del presunto autor del crimen se llevó a cabo el pasado lunes, jornada en la que, según algunos vecinos del Tiro de Línea, se advirtió una fuerte presencia policial en el entorno de la calle Almirante Topete.
RESTOS DE SANGRE.
Según confirmaron a este periódico fuentes policiales, el registro realizado en el domicilio del detenido arroja indicios suficientes de su participación en la muerte de esta mujer. La Policía tiene claro que el crimen se cometió en el domicilio de A.G.S. Durante las pruebas realizadas por la Brigada Provincial de la Policía Científica en el escenario del crimen, los agentes hallaron restos y manchas de sangre de la víctima al aplicar reactivos químicos.
