El videojuego que casi todos los analistas sitúan como líder de ventas de estas navidades ha tenido un parto difícil en el mercado. La fecha que se venía anunciando desde hace meses era la de hoy, martes 10 de Noviembre, sin embargo desde el pasado sábado 7 ya se encuentra disponible para su venta. El motivo; la ruptura del contrato de venta por parte de algún comercio, no identificado.
Lanzar una superproducción como Call of Duty, que mueve masas de fieles jugadores y más dinero que cualquier taquillazo , siempre es complejo. Los comerciantes ya toman por norma la ruptura del contrato de venta, en el cual se define la fecha de lanzamiento. Desde que las grandes cadenas y los pequeños comercios reciben el stock, se encienden las alarmas a la espera de que alguien tome la iniciativa, iniciando la avanlancha.
Esto sucedió el pasado Sábado, una vez la central de Activision-Blizzard (distribuidora del juego en cuestión que no ha facilitado ninguna información al respecto) recibe la confirmación de venta prematura toma una decisión: sancionar al comercio o dar la orden de venta por ruptura del contrato de venta, lo normal es que siga la última opción pues el título ya está en la calle y es difícil penalizar a veces todos los comercios que se adelantan. Dos razones añadidas: el juego ya llevaba varios días en redes p2p y descarga directa, el sabado es un día de lanzamiento preferente.
Una vez que Activision-Blizzard hubo dado luz verde, las cadenas y tiendas avisaron por teléfono y correo electrónico a los muchos usuarios con reserva del juego. La edición prestigio, que incluye un casco con visión nocturna por 149€ voló literamente de los estantes: Mediamarkt Sevilla comenta que las siete unidades prestigio fueron vendidas el mismo sábado.
Otras dificultades. A nivel internacional esta nueva edición de Call of Duty está viviendo diferentes problemas y polémicas. El juego, como ocurre siempre, no ha podido librar de las redes de intercambio de archivos (p2p) y servidores de descarga directa. En cuanto se filtra a la Red su distribución es implacable.
Una polémica muy sonada es la posible censura en Australia , pues el juego da la posibilidad de jugar en el bando terrorista, según el portavoz de un importante lobbie australiano "Las consecuencias del terrorismo son abominables en nuestra comunidad y, sin embargo, aquí estamos con un producto que pretende hacerse pasar como una actividad de tiempo libre".
También está siendo muy criticada la decisión de centralizar los servidores del multijugador para la plataforma PC , eliminando asimismo la posibilidad de lanzar mods (modificaciones del juego hechas por aficionados o estudios externos) para el multijugador. Esto ha llevado a miles de jugadores a planear en diferentes foros y blogs un boicot, que finalmente parece que no se va a cumplir.
El juego. La saga Call of Duty dio un importante salto de calidad con la primera edición de la subsaga Modern Warfare, no sólo por el cambio de ambientación que es de agradecer, sino principalmente por la factura técnica y el ritmo de las variadas estructuras lúdicas y narrativas.
Modern Warfare 2 llevará a las tres plataformas punteras en gráficos, excluyendo las portátiles y Wii, a un nuevo techo gráfico. Que quizá sea superado por Assasins Creed 2 o en el caso de Playstation por GT5. Algunas escenas del juego son muy impresionantes, se nota el trabajo de Infinty Ward.
Este juego es exquisito para cualquier jugador báse o medio, pero el videojugador empedernido encontrará las siguientes lagunas: Call of Duty, como le es propio, funciona hilando el desarrollo de la acción mediante scripts (cosas que ocurren siempre de la misma forma en un punto determinado), caminos unidirecciones (el jugador sólo puede ir por donde el juego dice que debe ir) y excesivas cinemáticas (cortes de video, que normalmente enfrían la inmersión, clave en este mundillo). Para los más hardcore les recomiendo dos títulos bélicos de reciente aparición que solucionan estos problemas: Armed Assault 2 y Operation Flashpoint 2, preferentemente las ediciones para pc.
